La campaña valenciana del aguacate se halla en plena recolección de la variedad Hass (la más conocida por el consumidor y cultivada de forma mayoritaria en España y a contraestación en Sudamérica) y con ella han vuelto los robos alentados por los atractivos precios que alcanza esta fruta subtropical.
La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) y la Asociación de Productores de Aguacate (ASOPROA) denuncian una ola de robos en las comarcas valencianas, que se repiten en otras comunidades productoras como Andalucía, y advierten además de que muchos de los aguacates sustraídos de los huertos se venden en mercadillos y fruterías locales sin la debida trazabilidad y sin haber llegado aún a su estado óptimo de maduración porque son de una variedad más tardía: Lamb Hass, la mayoritaria en la Comunitat Valenciana.
El presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado, lamenta que “los robos están perjudicando por partida doble a los productores valencianos: por un lado, les dejan sin la cosecha de todo un año, una cosecha que tiene un valor muy importante en el mercado, y ponen en peligro la continuidad de la explotación tras haber acometido una enorme inversión; pero es que también, por otro lado, los ladrones, por puro desconocimiento, sustraen aguacates de la variedad Lamb Hass con buen tamaño y un color similar al Hass pero que, al no madurar hasta dentro de varios meses, presentan un sabor a corcho o madera, lo que defrauda las expectativas de los consumidores y puede acabar retrayendo la demanda cuando llegue el grueso de la producción valenciana”.
Por su parte, el presidente de ASOPROA, Celestino Recatalá, recomienda a los agricultores que “presenten denuncias aunque crean que no sirven de nada y solo les hacen perder el tiempo, porque los equipos ROCA de la Guardia Civil nos dicen que acumulan más detecciones de lotes de aguacates robados en mercados locales que denuncias interpuestas por los productores. Si denunciamos, las fuerzas de seguridad tendrán más información para tratar de atajar esta lacra”. Asimismo, Recatalá solicita a la Delegación del Gobierno y a los ayuntamientos que “pongan más medios, tanto en los caminos rurales como en los puntos de venta, a fin de combatir unos robos que, en el caso del aguacate, amenazan el crecimiento de la principal alternativa de cultivo del campo valenciano”.