Bioline Iberia lanzó recientemente su sello CART (Climate Adapted Release Technology), que es sinónimo no solo de una tecnología sostenible y respetuosa con el medio ambiente, sino también de la adaptación de los organismos que producen a las diversas condiciones de estrés, como pueden ser el frío y el cambio climático general.
Manuel Gómez, responsable de Desarrollo de Bioline Iberia, describe en esta entrevista en EsRadio cómo afecta el frío la fauna auxiliar y ofrece algunos consejos para mantenerla con óptimo rendimiento en las bajas temperaturas sufridas estos días.
¿Cómo afecta el frío a la fauna auxiliar?
La temperatura es el factor abiótico que más afecta al comportamiento de los enemigos naturales. Los bajos valores que se alcanzan en este periodo del año pueden influir de forma negativa en su ciclo de vida, que se alarga considerablemente, ya que su actividad se ralentiza mucho. También influye en su capacidad de reproducción y fecundidad, poniendo muchos menos huevos y teniendo así menos capacidad de supervivencia. En definitiva, todo ello se va a traducir en un peor establecimiento y poblaciones más bajas en los cultivos.
También afecta negativamente en otros factores como el fotoperiodo. Con menos horas de luz también repercutirá negativamente sobre su actividad. No obstante, esto no quiere decir que nuestros auxiliares vayan a desaparecer o cesar su actividad de forma absoluta; no debemos olvidar que, en el interior del invernadero, y sobre todo en la planta, que es donde ellos se mueven, encontramos un microclima con unas condiciones mucho mas favorables que las que medimos nosotros en el ambiente exterior.
¿Qué recomendaciones puede dar para evitar los efectos negativos en los auxiliares?
Existen diversas recomendaciones para favorecer el establecimiento de los insectos beneficiosos durante el invierno. La mayoría de los invernaderos de la zona del sureste español no permiten un control climático automatizado. Sin embargo, sí tenemos claro que la utilización, por ejemplo, de dobles techos en el invernadero, sobre todo en cultivos como puede ser el pepino, nos permite incrementar esa temperatura mínima que puede ser suficiente para mantener la actividad de nuestros auxiliares. También se puede homogeneizar la temperatura a lo largo del invernadero y evitar el goteo sobre la planta.
Aunque no sea posible mantener a estos organismos de control biológico en su rango óptimo de desarrollo, sí que podemos incrementar las poblaciones y conseguir mejorar su establecimiento de diferentes formas. Por un lado, podemos aportar alimentación complementaria para contrarrestar la escasez de comida (presas) que suele darse en este periodo. Para ello se puede soltar Carpocolor (ácaros presa) que se distribuyen por el cultivo, ya sea manualmente o de forma mecanizada con sopladores de los que Bioline Iberia también provee al agricultor.
De esta forma incrementamos la presencia de ácaros depredadores como es el caso de Starskii y Swirscolor premium (Amblyseius swirskii), principalmente en cultivos como el pepino. En el caso de otros depredadores como Nesiline (Nesidiocoris tenuis), Oriline (Orius laevigatus) y otros por la introducción de huevos de Ephestia, una dieta que se utiliza en semillero para mejorar el establecimiento de Nesiline en las sueltas pre-trasplante. Dicha dieta complementaria favorece su desarrollo y capacidad de supervivencia.
Otra recomendación sería reforzar las poblaciones de fauna auxiliar, previamente ya introducidas, en cuanto lo permitan las condiciones y de esta forma aseguraremos un buen establecimiento antes de que empiecen a incrementarse las poblaciones de plaga, que es quizás lo más importante.
La suelta de ácaros depredadores complementarios, como el caso de Amblyline (Amblyseius cucumeris), en otoño e invierno, sabemos que hace muy buen control de Trips en condiciones de temperaturas más bajas, así complementa la acción de Starskii o Swirscolor premium soltados previamente pero que cuyas poblaciones se ven mermadas en este helado periodo.
Es muy importante el mantenimiento de plantas reservorio en el interior del invernadero, así como infraestructuras ecológicas como pueden ser setos en el perímetro, que nos permitirán un mejor establecimiento de los auxiliares en invierno.