Representantes de la Asociación de Organizaciones de Productores de Plátano de Canarias (ASPROCAN) han mantenido hoy una reunión con la ministra de Justicia, Pilar Llop, acompañada por el Consejero de Justicia del Gobierno de Canarias , Julio Pérez, y el Delegado del Gobierno en Canarias, Anselmo Pestana, en la isla de La Palma, a quienes han querido trasladar las principales urgencias del sector en relación con el proceso de reconstrucción de la isla tras los daños causados por el volcán de Cumbre Vieja.
Entre las medidas solicitadas por el sector se encuentran las siguientes:
- Definir un marco de ordenamiento que permita recuperar 200 has de cultivo en la zona de uso agrícola de costa sepultado por la lava para realojar a los afectados en una superficie, al menos, equivalente.
- Garantizar una vía jurídicamente segura para acometer obras y recuperar los terrenos para el cultivo con el compromiso de la Administración en reconstruir la zona de cultivo y realojar a los productores afectados.
- Definir un órgano ejecutor ágil y ad hoc, diferente a los procedimientos ordinarios de la Administración y con indicación de cómo proceder de forma concreta.
- Permitir la participación del sector en la definición del marco normativo y de gestión para aportar su conocimiento técnico y necesidades jurídicas para la reorganización urbanística y de infraestructuras del suelo.
La ministra se ha mostrado receptiva con las propuestas presentadas, ha asegurado compartir la necesidad de resolver la situación del cultivo afectado y se ha mostrado en disposición de buscar una fórmula para recuperar los terrenos. En este sentido, la ministra ha confirmado la apertura de un canal de participación para el sector, a través del cual ASPROCAN podrá hacer llegar sus propuestas al equipo técnico del Ministerio.
El Ministerio de Justicia y el Gobierno de España tienen un papel clave para posibilitar un marco normativo que haga que esta recuperación sea posible. Desde el sector del plátano se sostiene que las peticiones trasladadas al gobierno son técnica y jurídicamente viables, aunque requieren de instrumentos específicos de ordenación y gestión urbanística para agilizar los plazos.
La recuperación de las hectáreas de cultivo platanero perdido es una prioridad no sólo para el sector, sino para toda la sociedad palmera, ya que se trata de un sector que es motor económico y social de la isla, con una extensión de más 2.700 hectáreas dedicadas al plátano, que cuenta con más de 5.200 productores y que genera más de 10.000 empleos en toda la isla. Sólo en la zona afectada por la erupción son más de 500 familias las que dependen directamente del cultivo del plátano, cuya recuperación tendría un efecto positivo directo en la actividad y la economía de toda la población del Valle. En una isla que ya venía sufriendo un proceso de reducción poblacional y de envejecimiento de su población, el plátano es la principal fuente de ingresos de la zona.