España detecta una media de 11 alertas alimentarias al mes este año
En lo que va de año, las fronteras españolas han detectado 94 alertas alimentarias con un riesgo que va desde el nivel alto hasta otros menores por problemas como la rotura de la cadena del frío o contener bacterias y plaguicidas no autorizados que han impedido su entrada en el país.
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Según los datos registrados por la red de alerta rápida de la Unión Europea (Rasff), España ha detectado una media de 11 alertas alimentarias al mes en productos que, como consecuencia del control fronterizo, no han llegado a comercializarse en los supermercados.
Esta red, dependiente de la Comisión Europea, funciona como un portal que contiene una base de datos a través de la cual se hacen públicas todas las notificaciones de información o de rechazo de productos en la frontera.
En lo que va de año, se han detectado 38 alertas alimentarias menos que en el mismo periodo del año pasado, cuando se habían notificado a 16 de agosto de 2022 un total de 132.
Las cifras contrastan entre los distintos años ya que, en 2021, la Red de Alerta Rápida de la UE notificó 237 alertas y en 2020 la cantidad desciende a 48.
De riesgo “serio” al “sin decidir”
Del total de las alertas de este año, 19 tienen la categoría de riesgo “serio” para la salud y, de ellas, la mayoría se encuentran en ese nivel debido a la contaminación microbiológica por vibrio, salmonella o por contener la toxina aflatoxina.
En un grado menor, se dan las alertas con un riesgo “potencialmente serio”; en total, la Rasff ha calificado con este nivel a dos productos por presencia de vibrio y presencia de anisakis.
Por otro lado, el resto de las alertas oscilan entre los grados de “riesgo potencial”, “riesgo no serio” y “sin decidir”; dentro de ellas, hay alertas por todos los anteriores motivos, a los que se suman también otros como la presencia de residuos de plaguicidas.
El vibrio, presente en 4 de cada 10 alertas
La presencia de vibrio es el motivo por el que se han registrado un mayor número de alertas alimentarias en lo que va de año en España, con un 40 % del total.
El vibrio es un género de bacterias que habitan en el agua del ama y el agua dulce y se encuentran en muchos animales acuáticos, y su infección se asocia en general a gastroenteritis, bacteriemia, infección de una herida y tejidos blandos, celulitis, otitis y meningitis.
Al detalle, 37 de las 38 alertas notificadas pertenecen a la especie patógena de Vibrio Cholerae, que tiene dos serogrupos con capacidad para producir cólera, detectada la mayoría en langostinos congelados procedentes de Ecuador.
Precisamente sobre esta bacteria, la Agencia Española de Seguridad Alimentaria (Aesan) publicó un informe en el que recomendaban aplicar un criterio de “tolerancia cero” en la especie del Vibrio Cholerae en las fronteras.
La presencia de aflatoxinas, con once casos en total, y la rotura de la cadena del frío, con ocho casos, son otras de las causas por las que más se repiten las alertas.
Las aflatoxinas son micotoxinas producidas por un hongo localizado especialmente en zonas con climas cálidos y húmedos y pueden estar presentes en alimentos como cacahuetes, frutos secos, maíz y arroz, según la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (Efsa).
Varios tipos de aflatoxinas se producen de forma natural, en concreto, la aflatoxina B1 es la más frecuente en los alimentos y una de las aflatoxinas genotóxicas y carcinógenas más potentes.
Además, de entre los alimentos que han sido interceptados por las fronteras españolas y no permitida su distribución en los supermercados españoles, se han dado siete casos durante este año de “nuevos alimentos no autorizados”.
Por ejemplo, durante el mes de agosto se han notificado dos de “riesgo no serio” sobre un nuevo alimento no autorizado, la legumbre vigna aconitifolia, presente en preparaciones de hortalizas y cereales y procedente de India.
También se ha denegado la entrada en estos meses al país a ovoproductos en bollería no autorizada procedente de Marruecos o de otros alimentos que contienen presencia de plaguicidas no autorizados, como el óxido de etileno.
Las alertas, según sus países
Con un total de 19 notificaciones, el país de origen sobre el que más alertas se han registrado en lo que va de año es Ecuador, seguido de Australia y China, con diez alertas respectivamente.
Tras estos tres países, se sitúan Marruecos, con ocho productos con alerta, India y Egipto, con 6 cada uno, y Estados Unidos, con cinco.
En la lista de la Rasff también aparecen con una sola alerta hasta día de hoy otros países como República Dominicana, México, Sudáfrica y Turquía.
Fuente: EFEAgro