Posible deslocalización de empresas del Campo de Cartagena
Entre las causas, la organización agraria apunta a la inseguridad generada por la falta de agua de riego y la "criminalización" del sector a raíz de la contaminación del Mar Menor.
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El presidente regional de COAG, José Miguel Marín, teme que las empresas que tengan capacidad de deslocalizarse dejen el Campo de Cartagena, tanto por la inseguridad que genera el suministro de agua como por la criminalización que sufre el sector a raíz de la degradación del Mar Menor. En el balance anual, Marín enfatizó que los agricultores y ganaderos de la comarca «tienen un compromiso total con el cumplimiento de la ley», aunque deben hacer frente a una «situación difícil». «En la práctica puede producirse una regresión importante de la producción, y quizás no se consigan los efectos medioambientales que se persiguen», dijo este martes en rueda de prensa.
Marín considera «necesario levantar el mantra y la criminalización que sufren los agricultores del Mar Menor. Tenemos mucho que hacer, si bien hemos avanzado en los protocolos de producción sostenible, que van más allá de la producción ecológica». Consideró que actualmente «no hay problemas para el acuífero» debido al uso controlado y mínimo que se hace de los nitratos.
El presidente de COAG admitió que se ha producido «un importante daño reputacional» al sector debido a una «tendencia de opinión muy irresponsable y peregrina que acusa» a la actividad agraria. «Como murcianos, tenemos todos la obligación moral de minimizar estas corrientes de opinión sin criterio ni fundamento», recalcó. «Tenemos los sistemas de producción más avanzados; lo que se hacemos aquí no se hace en ningún lugar del mundo».
José Miguel Marín pidió a la CHS y al Ministerio que permitan extraer agua del acuífero del Campo de Cartagena, «que está rebosando y cargado de nutrientes que van al Mar Menor».
En su balance del año que finaliza, el presidente de COAG ha puesto énfasis en que existe «una absoluta inseguridad con el agua, que dificulta la plantación de cultivos. Los agricultores no saben si van a poder plantar o no. Existe una incertidumbre general y no sabemos hacia dónde vamos», dijo en referencia al recorte del Trasvase, al se sumará el cierre de pozos sobreexplotados en la cuenca del Segura. Aseguró que la merma del Trasvase provocará «sin duda» la pérdida de empleos y de hectáreas de regadíos.
En general, hizo un resumen «negativo» del año debido al incremento de los costes de producción (fertilizantes, plásticos, combustibles y electricidad), que cifró en una subida de entre el 50 y 60%; a lo que sumó la crisis de precios de origen; la entrada masiva de productos de terceros países con escasas garantías sanitarias; así como la reducción de cosechas debido a la inclemencia del clima.
«Existe un descontrol de las temperaturas que altera la floración de los árboles», precisó. Marín se mostró crítico con la reforma de la PAC y exhibió como un logro la nueva ley de la Cadena Alimentaria. Señaló que la uva de vino atraviesa una «situación catastrófica y gravísima», con la salida de derechos de plantación de la Región de Murcia hacia otras zonas.
Fuente: La Verdad