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Agricultores aprenden a desarrollar una agricultura más sostenible

La Fundación Miguel García Sánchez y la Universidad de Almería han impartido un nuevo curso centrado en Innovaciones Técnicas en la Agricultura Intensiva.

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Gracias a la iniciativa puesta en marcha por parte de Fundación Miguel García Sánchez con su Escuela de Agricultores y a través de una acción conjunta con la Universidad de Almería (UAL), durante el último mes más de 50 profesionales ligados a la agricultura han recibido formación específica impartida por el centro de Postgrado y Formación Continua, y el Centro de Investigación en Agrosistemas Intensivos y Biotecnología Agroalimentaria de la UAL.

Bajo el título Innovaciones Técnicas en la Agricultura Intensiva, los asistentes a este curso han explorado nuevas vías para poder desarrollar una agricultura más sostenible con métodos compatibles con los sistemas de producción de sus fincas, tanto hortícolas como subtropicales.

Tras un total de 22,5 horas de clase teórica y práctica estructuradas en cuatro sesiones celebradas en las instalaciones de Eurocastell Caña, y una última jornada de visita técnica a la finca experimental de la UAL en ANECOOP, han sido varios los docentes expertos en este campo de conocimiento los responsables de dirigir estas clases, entre ellos, el propio director del curso Juan Reca y el subdirector del mismo, Juan Martínez, ambos profesores de la Universidad de Almería.

Precisamente Reca apunta a la excelente respuesta de participación recibida, tanto por el número de asistentes como por su predisposición a explorar “con mucho interés los distintos temas que planteamos para las sesiones”, asegura. De carácter eminentemente práctico, el objetivo por parte del equipo docente “era mostrar una panorámica de las distintas herramientas y manejos que los agricultores ya pueden aplicar a sus propias explotaciones”.

Con una clara vocación por sumar al futuro del sector agroalimentario y los profesionales que lo conforman, desde Fundación Miguel García Sánchez entienden la innovación como eje conductor imprescindible para garantizar mejoras en los cultivos y hacerlos más rentables y eficientes para los agricultores.

Si bien la experiencia en este sector es un valor determinante, la correcta puesta al día de los últimos avances siempre es necesario, como por ejemplo apuntaba uno de los asistentes, Fernando Mulero, asegurando que “aunque hay muchos temas que ya vamos dominando, en este tipo de cursos te das cuenta que siempre nos queda por aprender, que la agricultura va cambiando y que tenemos que formarnos”.

Con un balance también muy positivo resumía su participación en este curso Antonio Correa, agricultor de larga trayectoria que destacaba “la cantidad de temas que hoy por hoy, son imprescindibles para que las producciones vayan mejor, aprendes nuevos métodos para mejorar la calidad del cultivo y te dan argumentos coherentes”. En este sentido, una de las materias de estudio más valoradas por los asistentes al curso era precisamente la relativa a una mayor eficiencia en el uso de los abonos y el riego.

El claro enfoque de esta acción formativa orientada a la innovación, ha sido uno de los grandes atractivos para los agricultores pues como señala el propio Correa, “es que necesitamos de la innovación porque es nuestro futuro dado que, si la aplicas bien a tus producciones, estás ganando en tiempo que poder invertir en la finca en otras tareas y al final te das cuenta que innovando eres un agricultor más eficiente”.

Así mismo, entre los asistentes al curso se encontraban algunos profesionales del sector como Elena Acosta, quien considera que los temas de estudio abarcados han sido muy acertados y de fácil aplicación en el tipo de agricultura que se desarrolla en la zona. “Son líneas de innovación que se pueden aplicar en el tipo de fincas que nuestros agricultores tienen, especialmente para aquellos que trabajan con subtropicales o en explotaciones de varias hectáreas porque tiene que ser una finca bastante grande”, asegura.

Aunar esfuerzos junto a grandes pilares de transferencia del conocimiento, tales como la Universidad de Almería, para ofrecer formación específica semejante a la recientemente impartida, es valorado de un modo muy positivo tanto por los profesionales agrícolas como por el sector en sí, ya que como destaca Acosta, “es toda una oportunidad de no estancarte e ir a más, que los agricultores tomen conciencia de que no todo es lo que uno sabe si no que puedes llegar a mucho más apostando por la formación continua y la innovación”.

Además de las instituciones organizadoras de este curso, han sido varias las empresas colaboradoras que con su patrocinio están permitiendo el éxito de estas acciones: Fundación Caja Rural de Granada, Nuhnems BASF, Syngenta, INFIA, Fertinagro y Herogra.

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