Según estas fuentes, “la campaña nacional de patata nueva ha arrancado esta misma semana, por lo que aún no ha habido margen suficiente para que el producto llegue de forma generalizada a los lineales de los supermercados”. Desde la distribución defienden que la patata española es siempre prioritaria, tanto por su calidad como por su proximidad, apostando por precios justos para el agricultor.
A nivel productivo confirma Alfonso Sáenz director de UDAPA y presidente Comité de Patata de FEPEX, que los primeros días de campaña no son suficientes para asegurar los volúmenes necesarios que exige la gran distribución. “No se puede llenar de golpe toda la cadena de suministro nacional en tres días”, apuntan. La logística, la recolección progresiva y la puesta a punto del producto requieren tiempo. Además, señalan que en el arranque de cada campaña existe un periodo de solapamiento con la patata de importación, necesario para garantizar el suministro continuo al consumidor y evitar desabastecimientos.
Respecto a las patatas de conservación procedentes de Francia, algunas cadenas confirman que están en proceso de ser retiradas, precisamente ante la llegada de la patata nueva española. Pero insiste Javier Boceta, Meijer Spain “No se puede dejar sin producto al consumidor final mientras se ajusta el relevo de campaña”. La realidad del sector muestra, por tanto, una dinámica habitual en cada arranque de campaña, unos días de convivencia entre importación y producto nacional, hasta que la oferta española está en pleno rendimiento y permite abastecer con regularidad.
«El mensaje de la distribución a los agricultores ordenados y con contratos es de no preocuparse que las patatas que hay en Andalucía hacen falta para abastecer el mercado, los precios tienen que estar en el entorno que se cobró el año pasado para compensar las pérdidas y los sobrecostes que los agricultores han tendido por las intensas lluvias y el mal tiempo», añade Marcos Román, presidente de la sectorial de Patata de Asociafruit.
El sector se encuentra alineado con la distribución, «su apuesta por la patata nacional se ha visto confirmada en los últimos años, confiamos en la estrecha relación que hemos construido en este tiempo», concluyen.
Desde la distribución se hace un llamamiento a la responsabilidad y a no generar alarma en el consumidor, subrayando que el compromiso con el producto español sigue intacto y que en pocos días la patata nueva nacional copará los lineales, como sucede cada año una vez que la campaña se estabiliza.