La pandemia ha acentuado las tendencias que estaban en curso, tendencias que se convierten en retos para el sector de las berries. Así, ofrecer un producto de mayor calidad para el consumidor y más respetuoso con el medio ambiente son condiciones que se imponen como necesarias actualmente. En esta línea y según Harold Huot, gerente de Surberry, la gestión de los recursos y la selección varietal se convierten en cuestiones clave en el cultivo de estas frutas para poder alcanzar el éxito.
La selección varietal siempre ha sido un aspecto muy cuidado en Surberry. De hecho, su apuesta principal es la frambuesa Adelita, y en fresa Calinda. Adelita esta campaña está sufriendo un ejercicio muy duro con poca oferta debido a la climatología. Sin embargo, los precios están siendo buenos, con un retorno medio a la producción de alrededor de 10€ por kilo en un periodo de más de 2 meses. En cuanto a Calinda, aunque el volumen está siendo mayor esta temporada con respecto a años anteriores, hay un diferencial de precio en el mercado de al menos un 20% en relación a las variedades convencionales de fresa.
Esto demuestra que la calidad, pase lo que pase, se valora en el mercado. En la campaña de arándano, sin embargo, en Surberry prevén que se den puntas de producción provocando una falta de mano de obra en el proceso de recolección. “Estimamos que una gran mayoría de las variedades empezarán a producir a la vez”, detalla Huot.
A nivel general, la estrategia para lograr una buena campaña de berries ante este difícil inicio de temporada es para Surberry invertir en el proceso de producción, controlando al máximo la calidad del producto. De cara al futuro, continuarán apostando por variedades innovadoras, productivas y con calidades olfativas excelentes. Además, tienen previsto ampliar su ventana de producción y desarrollar su línea bio.