Esta semana se ha presentado la feria Organic Food Iberia, el evento de producto ecológico más importante para el sector, que se llevará a cabo los días 8 y 9 de septiembre, y que va a ser “la primera gran cita de la alimentación de forma presencial desde la pandemia”, tal y como reconoció Eduardo López-Puertas, director general de IFEMA Madrid.
Se esperan más de 300 expositores y cuenta con el apoyo y el patrocinio de Ecovalia, entre otros. Con su presidente, Álvaro Barrera, analizamos la realidad del sector ecológico en España, en el que “todavía hay mucho por hacer en materias de producción, consumo, promoción o ayudas públicas”.
Situación del consumo
El contexto europeo actual lleva tiempo dibujando un escenario muy favorable para el sector del producto ecológico y, en concreto, la agricultura. “Está en el centro de la estrategia De la Granja a la Mesa”, comenta Barrera, y “presenta grandes expectativas y oportunidades”. Actualmente, en España, los niveles de consumo son bajos y rondan el 2,5%. “97 de cada 100 españoles no consume ecológico, nuestro reto es que en 2030 solo sean 90 y llegar al 10% de ese consumo”, situando a España en niveles europeos.
Desde la asociación se muestran optimistas y hacen un llamamiento para aunar fuerzas y que se cumplan estas metas. Pero, ¿se puede ser optimista ante una situación de crisis sanitaria y económica como la que estamos viviendo?
Las crisis favorecen al producto ecológico
Pues parece ser que sí y el presidente de Ecovalia lo tiene claro: “El sector ecológico ya duplicó su crecimiento en los años más duros de la economía española, entre 2012 y 2015”, y resalta “que llegó a aumentar hasta un 21%”. Y razón no le falta, según cifras oficiales, durante la pandemia en España se ha disparado este consumo hasta el 35% y el balance anual total fue del 20%. Y en concreto, “de ese 35%, lo que más ha crecido son las frutas y las verduras”.
Preguntado por las causas de este fenómeno, Barrera se lo achaca a varios factores: la edad de los consumidores, su concienciación, el aumento del gasto familiar en alimentación o la búsqueda de la salud y lo saludable en todos los ámbitos de la vida, incluida, por supuesto, la comida. “6 de cada 10 consumidores de ecológico tienen menos de 35 años, invierten en salud y en respeto por el medio ambiente y lo anteponen a necesidades como puede ser un smartphone de última generación”.
¿En qué situación están las zonas productoras?
Es de todos conocido que España es el mayor productor de ecológico de Europa y que actualmente cuenta con un 10% del total de la producción de frutas y verduras. La nueva estrategia de la Unión Europea aspira a que, en 2030, los países alcancen el 25% de la producción ecológica.
A priori puede parecer un reto asumible, pero Barrera destaca que hay grandes diferencias entre zonas, como Castilla y León, “que tiene que ponerse las pilas y revisar las políticas”, ya que no llegan ni al 1%; y otras como Andalucía o Cataluña, que son “las alumnas aventajadas y el principal núcleo del ecológico de nuestro país a día de hoy”.
¿Qué demanda el sector para mejorar sus cifras?
Desde Ecovalia son conscientes de que la mejora de cifras es un reto y que para ello se necesita cambiar, mejorar ciertas situaciones y que se les respalde tanto con dinero como con promociones. En concreto, realizan tres demandas: un plan nacional de estructuración del sector, promoción con fondos públicos y homogeneidad de criterios entre las comunidades autónomas. “España, siendo un país que lidera y que quiere seguir liderando, necesita estos cambios”, afirma Barrera.
El tema de promoción (sobre todo para resolver “los falsos mitos” que hay entorno al producto ecológico) es fundamental. “Aún hay gente que piensa que los productos ecológicos no son rentables, son feos o no compensan por precio”, comenta; por ello, hay que seguir comunicando y enseñar al público a valorar el trabajo que se realiza en todos los eslabones de la cadena. “Tenemos un sector con una alta capacidad de resiliencia, que ha trabajado muy bien en las estrategias del campo y todo esto se tiene que conocer”. Aunque a finales del año se ha acordado con el Ministerio una campaña de promoción para el ecológico, la realidad es que, a día de hoy, la mayor inversión se hace por parte de las entidades privadas.
Pero, además, desde la asociación recuerdan que Europa exige que un 30% de los proyectos de investigación tienen que ir dedicados a la producción ecológica, y eso “ni se ha cumplido, ni se está cumpliendo”.
La sensación general es que corren buenos tiempos para el ecológico, pero aún hay mucho por hacer de parte de todos.
