El kiwi SunGold, la revolución nutricional

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o hay mejor forma para conocer un producto que dándolo a degustar, y para ello acudimos a la presentación que realizó la compañía Zespri de su nueva variedad de Zespri SunGold en el restaurante La Cocina de San Antón a través de un brunch con medios trade de alimentación entre los que nos encontrábamos. Enrique Guío, director de Mercado, y Esther Marinas, directora de marketing de Zespri Ibérica fueron los encargados de explicar, en un ambiente distendido y con soporte audiovisual, las características de esta nueva variedad de kiwi que revolucionará el mercado y que desde mayo se está comercializando en España.

El kiwi SunGold es una mejora de la variedad Gold, el kiwi de Zespri de pulpa amarilla, obtenido tras diez años de esfuerzos en I+D+i en colaboración con la empresa Plant Food & Research en Nueva Zelanda. Se caracteriza por contar con un elevado nivel de firmeza y gran capacidad de conservación que facilitan la exportación, un buen sabor en respuesta a las exigencias del consumidor, alta producción y un mayor calibre de fruto, resultando atractiva para productores, comercializadores y consumidores. Pero principalmente destaca por ser el número 1 en cuanto a valor nutritivo, ya que presenta una elevadísima cantidad de vitamina C, muy superior a la cantidad diaria recomendada, “que se sitúa por encima de los valores de otras variedades de kiwis y de otras frutas como el cítrico”, según comentó Marinas en la presentación. Además, SunGold es rico en fibra y en actinidina, una enzima que favorece el proceso digestivo, y sólo representa 57 Kcal/ 100 gr de producto.

Sin duda, hablamos de una super-fruta que se convertirá en un referente mundial en el mercado del kiwi, por su riqueza nutricional y por su pulpa amarilla, tierna, jugosa con intenso sabor dulce y un toque tropical, que atrae hasta los más pequeños.

A cargo del chef Miguel Ángel Caserío, pudimos degustar algunas de las posibilidades culinarias de la nueva variedad de kiwi, con diferentes presentaciones en dulce y salado, que deleitó nuestro paladar animándonos a repetir su consumo, para no sólo concebirlo como una fruta, sino también como un complemento en las comidas.