Agua, ecología y economía: El rompecabezas en Campo de Cartagena

Autora: Lydia González

Hace ya unos seis o siete años que se viene atacando al sector agrícola y parece que eliminarlo sería acabar con todos nuestros males. Hay que decir primero que ese sector agrícola está formado por personas, por familias enteras dedicadas al cultivo de frutas y hortalizas a veces desde varias generaciones. Algunos de ellos han visto su vida cambiar desde una agricultura pobre de medios, hasta una agricultura de última generación, modelo para el resto del mundo, en la que cada vez hay que cumplir con más exigencias adoptadas unilateralmente sin, no ya con el viejo agricultor de la boina, con todos nuestros respetos, sino con todo un ingeniero agrónomo que sabe muy bien de lo que habla y cómo se pueden hacer verdaderamente las cosas para que todos salgan ganando. Hay que cuidar urgentemente al medio ambiente, cierto, pero también hay un ecologismo de sillón de oficina en Holanda que poco tiene que ver con la realidad de aquí. Esta situación es la que se vive en el campo y para romper con tabúes y acercar otro punto de vista al lector, Revista Mercados ha pasado un día en el campo de Cartagena donde el Mar Menor, el Trasvase Tajo-Segura y la sequía, conforman una situación muy complicada para la economía de zona.

Cultivo del pimiento y la transición ecológica

Visitamos Cartagena con motivo de la presentación de la campaña #vitamínateconpimiento de Semillas Fitó, donde conocimos la importancia de este cultivo en la zona y en España, y a su vez las dificultades que atraviesan, entre ellas, la transición ecológica. Se trata de una verdura de primera categoría cultivada por muchas familias. ¿Cómo se combina esto con la transición ecológica? Fernando Gómez de Proexport habla más de “una imposición que de una transición”. Según Gómez “aquí se trabaja dando un triple salto mortal, hemos de seguir una regulación muy rígida por el Mar Menor, la amenaza de la pérdida del Trasvase Tajo-Segura y muchas más exigencias como recoger el agua de lluvia, aplicar la biodiversidad, la protección contra escorrentías, etc”. Sin embargo, “todos estos retos nos han hecho mucho mejores”.

La capacidad de adaptación que tienen las empresas de la zona es digna de admirar

En los invernaderos de El Montes, el pimiento es un producto de gran relevancia. Esta empresa familiar representa ese desarrollo que comentábamos al principio. Eva Montes, gerente de la empresa, emplea a unas quinientas personas directas y hasta ochocientas contando con las indirectas. Montes comenta que “casi todo lo que producimos sale fuera, es decir, alcanza esos estándares tan altos de calidad, pero no hay que olvidar que los rendimientos han bajado casi un 40%” y continúa subrayando que “para nosotros la prioridad es el campo, podemos comercializar, pero nosotros vivimos de la tierra, cuidamos de la tierra, desde mis bisabuelos, abuelos, nosotros, mis hijos y sobrinos” y recordó que “la capacidad de adaptación que tienen las empresas de la zona es digna de admirar. Quizá grandes multinacionales no podrían hacerlo”.

Por su parte, Óscar Rosique gerente de Agrodolores, una subasta y comercializadora también de la zona, nos explica cómo funciona este sistema en el que confluyen agricultores y corredores que representan a empresas de España y Europa. La subasta funciona con un sistema de puja a la inversa, la trazabilidad es transparente y exacta y el precio se marca cada día según la oferta y la demanda. De nuevo aquí, encontramos la gran cantidad de pimiento que traen los agricultores para su venta diaria. Sin duda, el cultivo del pimiento es algo crucial en sus vidas. Subasta del Sureste, Agrimesa o Mercagrisa son otras subastas y comercializadoras de la zona.

Mariano Zapata: el Trasvase es imprescindible para vivir e innegociable

A Mariano Zapata, gerente de Mercagrisa y presidente de Proexport, le preguntamos sobre el uso del agua en el regadío del pimiento a lo que responde que “en el cultivo del pimiento se hace un uso del agua extremadamente eficiente, solo con sistemas de goteo desde hace más de 40 años, con eficiencia y optimización escrupulosa”. La mezcla de agua desalada “no es una opción porque le sienta muy mal a una producción de pimiento, da una rentabilidad baja y mala calidad del producto, la carne del pimiento se mancha, necesitamos buena calidad de agua dulce para esta verdura”. El anunciado recorte del Trasvase Tajo-Segura “en el pimiento sería un daño tremendo, por no hablar de cifras económicas o de paro. Ahora producimos unas 200.000 toneladas de producto de primera, la pérdida de empleo sería terrible porque en la mayoría de invernaderos se planta pimiento, para nosotros el Trasvase es imprescindible para vivir e innegociable”.

Y así terminamos la jornada con Fernando, Óscar, Eva o Mariano. Todas, personas que se dedican al pimiento y dan trabajo a muchas otras en el Campo de Cartagena y afrontan los retos del agua, la ecología y la economía cada día en un sector altamente competitivo. ¿De verdad que esto no vale un pimiento?

Gracias a Semillas Fitó y a Proexport pudimos conocer también la realidad del sector del pimiento.