Tradición, sostenibilidad y transformación, los 3 pilares de la agricultura cretense
Creta es un potencial agrícola en transformación. La isla, ubicada en el mar Egeo, es un lugar de gran importancia histórica y cultural. Además de su rica historia y sus bonitos paisajes, ha sido durante mucho tiempo el centro de actividad agrícola griega. La agricultura ha sido y es una parte fundamental de su economía y su estilo de vida durante siglos. Gracias al programa europeo Mediterranean Combo profundizamos en la producción hortofrutícola de Creta, destacando su tradición, sostenibilidad y transformación. Cualidades que les permiten seguir abriendo mercados en Europa.
Comparte
Tradición
La agricultura en Creta tiene sus raíces en la antigüedad, cuando las civilizaciones florecían en la isla hace más de 4.000 años. Conocidos por su ancestral cultura y su capacidad para el comercio marítimo, también eran expertos en la agricultura. En aquel entonces, practicaban una agricultura diversa y sostenible, cultivando una gran variedad de productos. Utilizaban métodos de irrigación eficientes y construían terrazas en las laderas de las montañas para aprovechar al máximo la tierra disponible.
Hasta el día de hoy, la agricultura en Creta sigue siendo una parte fundamental de la vida de la isla. Los cretenses han mantenido la tradición agrícola y han adaptado sus métodos a los tiempos modernos. La tierra fértil y el clima mediterráneo de la isla proporcionan condiciones óptimas para el cultivo de una amplia variedad de productos agrícolas.
Tomate, pepino, pimiento y berenjena
Estos cuatro productos son los predominantes en los cultivos bajo invernadero que se desarrollan en la isla, dentro de los cuales producen diferentes variedades (tomate cherry, rama, lobello o beef; y pepino mini/italiano).
Nuestra visita comenzó por la cooperativa AC Nótos Fresh, quien aglutina a 39 productores de la zona de Ierapetra. Aún en una fase muy inicial de la comercialización, pero con una base productiva que alcanza los 8 meses de suministro. Su responsable de Ventas y Exportación, Prokopis Pantazis, nos explicaba que año a año estaban creciendo en el volumen de comercialización, a la vez que espera destinar las próximas inversiones a nuevas líneas de manipulación que permitan aligerar este proceso.
Posteriormente y en la misma región de Ierapetra, con un volumen similar a Nótos, conocimos las instalaciones e invernaderos de Kritiko Pervoli. Esta cooperativa, que cuenta con certificados GRASP y GlobalGAP, posee unas líneas de procesamiento más modernas, que reflejan las más de 40 personas que allí trabajan. Ya en campo, nos explicaron la situación de su principal cultivo, el tomate en Creta, muy amenazado por la Tuta Absoluta y que, para contenerla, como en la mayoría de la isla, combinan control biológico y fertilizantes.
En el caso de AC Anatoli, principal cooperativa de la isla, el organigrama y la estructura denotan un mayor nivel de profesionalización, debido al gran volumen que comercializa, con más de 200 productores y una superficie total de 250 ha. Su responsable de Ventas y Exportación, Nikos Triantafyllopoulos, detalla que, de esta producción, cercana a las 20.000 tn, exportan algo más del 30%. Cifra superior a la media del país que se encuentra entre el 15%, enfocado en mercados de países del Este. Nos destacaron desde la compañía su sistema de subasta digitalizado, que llevan utilizando varias campañas y que les permite una gestión más ágil y ordenada de la venta.
La cuarta, y última visita fue a las instalaciones de Tympaki. Con Giannis Tzortzakakis al frente del departamento de Ventas, recorrimos cada una de las naves de la cooperativa de segundo grado. Las nuevas y modernas instalaciones de la entidad están equipadas con los últimos sistemas de clasificación, estandarización y envasado, asegurando así que los productos lleguen al consumidor final en excelentes condiciones. Con más de 500 agricultores asociados (incluyendo el olivar), exporta más del 40% de la producción y tienen capacidad para acceder en pocos días a mercados como Alemania, Rumanía, Bulgaria y Serbia.
Potencial
A lo largo de los años, la agricultura en Creta ha enfrentado desafíos y cambios. La introducción de tecnología moderna y las nuevas prácticas agrícolas han mejorado la eficiencia y la productividad, pero también han planteado preocupaciones sobre la sostenibilidad y la preservación del medio ambiente. Afortunadamente, casi todas las empresas visitadas son conscientes de la falta de agua y de la reducción del uso de fitosanitarios, llevándolos a adoptar enfoques agrícolas respetuosos con el medio ambiente y promoviendo la eficiencia, tanto hídrica como energética.
Su enfoque en la calidad, la diversidad y la producción local ha demostrado ser exitoso
Además, la producción local ha cobrado impulso en Creta. Los agricultores y productores han establecido contacto con mercados y cooperativas agrícolas donde venden directamente sus productos a los consumidores. Esto fomenta una mayor conexión entre los agricultores y la comunidad, y garantiza que los alimentos sean frescos y de calidad. Los productos locales también son una parte importante de la herencia cultural cretense, ya que reflejan las tradiciones y los sabores únicos de la isla.
Su enfoque en la calidad, la diversidad y la producción local ha demostrado ser exitoso, y la agricultura sigue siendo un pilar fundamental de la economía y la cultura de Creta.
En definitiva, tras la visita organizada gracias al programa Mediterranean Combo, pudimos constatar que la agricultura en la isla de Creta tiene un futuro muy positivo, aunque deber ir acometiendo y superando los retos a los que debe enfrentarse para crecer y alcanzar todo su potencial.
Oportunidades y Amenazas
- Mercados emergentes. Grecia juega un papel estratégico en las rutas comerciales entre Europa, África y Asia; ofrecer un producto de calidad y ser la puerta de entrada y salida de muchos cultivos puede aportarle un papel clave.
- Unión del sector. La producción cretense está muy atomizada, las cooperativas que hemos visitado y que son más representativas necesitan de la colaboración y la planificación del sector para poder llegar con más capacidad comercial a los mercados.
- Mano de obra. El sector tiene un déficit de mano de obra en el campo, lo cual lastra la capacidad productiva de la isla, que recibe principalmente trabajadores de Pakistán y países africanos.
- Tuta absoluta. Al igual que en España, esta plaga está causando muchas pérdidas en los cultivos cretenses, por lo que deben tratar de mejorar los sistemas de control para minimizar su impacto.