Durante la firma, Planas se ha mostrado convencido de que este convenio va a permitir, aprovechando fondos europeos, mantener el impulso sostenido en las obras de modernización de regadíos que Extremadura necesita. Ha asegurado que modernizar regadíos supone un paso fundamental para aumentar la competitividad del sector agrícola, aportar más valor añadido y, de esta forma, incrementar la renta de los agricultores y mejorar la calidad de vida de un medio rural vivo y poblado. También es una oportunidad para la incorporación de jóvenes y mujeres a la actividad agraria.
En este sentido, ha señalado que el objetivo principal es contar con un regadío inteligente, de la máxima eficacia, que permita producir más alimentos con un menor consumo de agua y energía, y contribuir así a la triple sostenibilidad ambiental, económica y social.
Dos cifras lo constatan: en los últimos 20 años el regadío ha aumentado su superficie en España un 9% mientras consumía un 14% menos de agua.
El ministro, que considera el regadío como «la joya de la corona» de la agricultura y la ganadería españolas, ha indicado que es fundamental para la economía, ya que aporta, en condiciones equivalentes, seis veces el valor del secano y tres veces más de empleo.
Obras de regadío
En la misma línea, Planas ha asegurado que el regadío es la punta de lanza de la agricultura española. De hecho, España es el país que más superficie de regadío tiene en la Unión Europea, con más de 3,8 millones de hectáreas (22% de la superficie cultivada). En este ámbito, en los últimos 20 años se han realizado importantes inversiones en transformación y modernización de regadíos. Actualmente, el riego localizado abarca más de la mitad de la superficie de regadío (52%).
Planas ha recalcado que alcanzar esta situación ha sido posible gracias a una inversión pública de más de 3.000 millones de euros, para modernizar 1,5 millones de hectáreas y transformar otras 200.000 hectáreas, siempre en colaboración con las comunidades autónomas y los regantes.
En el caso de Extremadura, desde 2000 a 2020 se han finalizado obras de transformación en regadío de 17.116 hectáreas, con una inversión del MAPA de 31,8 millones de euros. Y en cuanto a la modernización, en este mismo periodo se han ejecutado obras por valor de 129,14 millones de euros para modernizar 132.624 hectáreas, lo que beneficia a unos 23.900 regantes.
En este contexto, la firma del presente convenio va a permitir una prospección de nuevas actuaciones para impulsar conjuntamente entre ambas administraciones y las comunidades de regantes, organizaciones estas últimas que son clave en el buen uso y la gestión del agua para garantizar su uso equitativo.
Asimismo, el ministro ha hecho referencia a las negociaciones para la reforma de la Política Agraria Común (PAC), donde España defiende que las inversiones en regadío puedan continuar ejecutándose con el fondo FEADER. También ha indicado que el Gobierno de España trabaja ya para poder destinar parte de los fondos del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia a las inversiones en regadíos.
Exportaciones agroalimentarias
Luis Planas ha facilitado también algunas cifras recientes sobre el sector exportador agroalimentario, que, contrariamente a la contracción que ha tenido lugar en otros casos como consecuencia de la pandemia, ha seguido creciendo en el último año.
Así, con datos de finales de junio, las exportaciones alcanzaron los 4470 millones de euros, un 5,9 % más que en el mismo mes de 2019.
Por su parte, el valor interanual de las exportaciones llegó a los 54.304 millones de euros, con un incremento del 5,6%.
La balanza comercial en este caso arrojó un saldo positivo de 15.732 millones, lo que supuso un alza del 18,2%.
El sector, ha recalcado, no solo ha sido capaz de producir para abastecer a los ciudadanos en unas condiciones muy difíciles, sino que ha sabido mejorar incluso su perfil exportador.
Dos tercios de estas ventas exteriores tuvieron como destino la Unión Europea. Fuera de esta, China y Estados Unidos son los principales compradores.