En este contexto, no todo son malas noticias, y es que pese a esta época convulsa, el campo almeriense sigue luchando y trabajando por producir y comercializar el mejor de los productos. En este sentido, sí que hay un hito especial en esta campaña. Se trata de la puesta en marcha de Coprohníjar Bio, las nuevas instalaciones de esta cooperativa dedicadas en exclusiva a un cultivo ecológico al que tienen ahora como gran apuesta de presente y futuro.
Además del levantamiento de la planta, situada en el paraje de Los Pipaces de San Isidro (Almería), han adquirido maquinaria adecuada para la manufactura de tomate, calabacín y pepino ecológico. El objetivo es mejorar la calidad del producto y aumentar la exportación, dado que alrededor del 97% de la cifra de negocio procede de las ventas a países de la Unión Europea.
Cabe destacar que esta nueva infraestructura de Coprohníjar responde al incremento de la superficie de cultivo ecológico de las 90 hectáreas a las 150 que ya han producido durante la presente campaña. La ampliación es fruto de incremento de la producción de hortalizas bio y que pasen a representar el 35% del volumen comercializado. Aunque ya está funcionando, lo hará definitivamente a pleno rendimiento a partir del mes que viene, con el manipulado de los productos de primavera.
Además, tal y como avisa su presidente, Juan Segura, con estas nuevas instalaciones los socios de la cooperativa tienen estructura suficiente para continuar creciendo con un amplio margen y por mucho tiempo, ya que son capaces de manipular de 25 a 30 millones de kilos. Incluso, en un momento dado, puede habilitarse una parte de ellas a convencional en función de necesidades.
Fuente: Huelva Información
