La fruta ya es un snack
Sanlucar Fruit comercializará el envase diseñado por tres estudiantes zaragozanas de Ingeniería, con depósito para los huesos.
Un recipiente premiado. El Cluster de Envase y Embalaje de Valencia organiza todos los años un concurso en el que varias empresas proponen un reto a los estudiantes de Ingeniería de toda España. Este año, tres estudiantes de la Universidad de Zaragoza se han llevado el premio del Cluster, con un envase diseñado para snack de fruta para la empresa Sanlucar Fruit.
‘On the go’ es el término comercial que define los snacks a la venta en lugares de paso, hospitales, aeropuertos, estaciones de tren… Este destino es el del envase de Eva Gallego, Soraya Fernando y Paola Pequerul, un recipiente que puede albergar cincuenta gramos de uvas, arándanos o cerezas, cilíndrico y transparente y con repositorio para ir echando los huesitos y otros desechos de las frutas.
Javier García, director de packaging de Sanlucar Fruit, que eligió el envase de las universitarias zaragozanas entre sesenta trabajos enviados a esta empresa castellonense, destacó lo «visualmente atractivo y funcional» que es el diseño de Gallego, Fernando y Pequerul. Definió el envase como «muy innovador, adecuado para fruta premium» (producto exclusivo y de máxima calidad). Y dijo más: «Es muy ergonómico, se puede llevar cómodamente en una mano, el producto vivo queda totalmente visible y unos profesionales no lo hubieran hecho mejor«. Sanlucar Fruit, empresa fundamentalmente exportadora a Europa, estudia ahora la producción de este envase con otra compañía alemana. Las autoras, alumnas de tercero de Ingeniería de Diseño en la EINA, han recibido un impulso a sus «ganas de trabajar» con este reconocimiento. Y la colaboración continúa: Eva Gallego quiere hacer con Sanlucar Fruit su proyecto de fin de carrera.
Sobre la mesa, todos los trabajos recogidos gracias a este concurso. Javier García los contempla y subraya «lo bien que las universidades han entendido el enfoque comercial, el cómo venderlo, a quién…»; lo que dice mucho de los esfuerzos del ámbito académico español por adaptarse a los requerimientos del mercado.
Fuente: Heraldo.es