La campaña de fruta de hueso va a ser totalmente diferente a las anteriores este año. A la reducción generalizada por el arranque de superficie y la menor previsión de cosecha generalizada, también a nivel europeo, se suman las incidencias climáticas como la acaecida el pasado martes por la tarde en diferentes localidades de Lleida.
De 19.45 h a 20.30 h cayó una importante granizada en los municipios de Torres de Segre, Soses, Alcarràs, Aitona, Sarroca de Lleida, Ximenells y Alcanó, que afectó gravemente a la cosecha de melocotón, nectarina y paraguayo, que se encontraban en plena etapa de recolección. Los granizos eran de gran tamaño (como una moneda de euro algunos) y han mermado una gran parte de la cosecha. “Ha sido un golpe muy duro para toda la zona productora y las previsiones de abastecimiento de esta semana, por ejemplo no se podrán cumplir”, comenta Santi Bonet, responsable de comunicación de Fruits de Ponent, quien explica que aún están valorando las pérdidas registradas en la comarca del Bajo Segriá, donde cuentan con zonas afectadas en un 40%, 60% o incluso en un 80%.
El Departament de Agricultura ha estimado los daños en 5.968 ha afectadas y entre el 60 y 100% de los frutales perjudicados en las diferentes explotaciones, según Asaja Lleida. Los productores están a la espera de la valoración por parte de Agroseguro.
“Nos encontramos en un momento álgido de la campaña con un volumen muy importante de producción y esta tormenta es una desgracia que va a provocar que se pierdan, entre otras cosas, muchos puestos de trabajo”, comenta Pere Roqué, presidente de ASAJA Lleida.
Lleida es una de las principales zonas productoras de fruta de hueso de España y este incidente puede provocar falta de aprovisionamiento a sus clientes por la escasez de producto y altos precios en el mercado. Su producción suele rondar las 20-25.000 tn por campaña y ya este año se esperaba menos por las 2.000 ha arrancadas en Cataluña.
Su presidente lamentó que la granizada ha llegado en un año que debía ser «el de la recuperación del sector», después de que en la campaña del 2019 hubiera pérdidas de 65 millones de euros, según los cálculos del sindicato.
Desde Asaja Lleida están reclamando ayudas al Departament de Agricultura de la Generalitat para que traslade su situación y necesidad al Ministerio.