Agrobío continúa trabajando en distintas líneas estratégicas entre las que destaca la gestión de la biodiversidad funcional con proyectos de control conservativo que mejoran el control biológico de plagas y favorecen el hábitat de la fauna autóctona, contribuyendo así al medio ambiente y al manejo sostenible pero altamente eficaz de las producciones agrícolas.
Actualmente, el manejo de la biodiversidad es fundamental, sobre todo para los cultivos orgánicos tanto de hortícolas, fresas y berries en invernadero como de frutales y cítricos al aire libre. Desde Agrobío, además, insisten que hay que realizarlo desde una base sólida de conocimiento y experiencia, apostando por un asesoramiento personalizado al agricultor, conscientes de que dar soluciones innovadoras es fundamental para hacer frente a los nuevos retos del campo, como es el caso del pulgón y otras plagas que se han ido haciendo resistentes a los tratamientos agroquímicos.
Agrobío cuenta con estrategias de control biológico conservativo que están dando excelentes resultados y que permiten adaptarse a las necesidades de cada finca. El uso de plantas banker e islas de vegetación en el interior del invernadero y setos funcionales en el exterior están demostrando ser una de las herramientas más eficaces para el control del pulgón. Permiten al productor mantener y multiplicar las poblaciones de parasitoides como los Aphidius, pero también de los depredadores como las crisopas, sírfidos, Aphidoletes y coccinelidos, insectos que el agricultor demanda cada día más por su alta voracidad y eficacia. Y una vez más, adelantarse a la entrada del pulgón será la clave.
Agrobío parte de una estrategia preventiva que consiste en la plantación de líneas de cereal inoculadas con pulgón específico antes del trasplante y realizar a continuación sueltas de parasitoides como APHIcontrol y MATRIcontrol e, incluso, MIXcontrol, una mezcla de diferentes avispillas que realizarán un control óptimo sin necesidad de identificar la especie de pulgón plaga.
SIRFIcontrol y PLANTA Lobularia para adelantarse al pulgón
Pero existen otras estrategias preventivas, como es el caso del manejo de los sírfidos. Agrobío comercializa dos especies, S. rueppellii y E. balteatus, (SIRFIcontrol-R y B), aportando diferentes ventajas según el tipo de pulgón plaga y su eficacia frente a las altas temperaturas. Los formatos utilizados de suelta son las pupas y las larvas; teniendo en cuenta que en estrategias preventivas es recomendable conseguir una población inicial de adultos, fácil de establecer cuándo la finca cuenta con flor.
Entre las plantas más utilizadas se encuentra la Lobularia maritima. Agrobío ha seleccionado especialmente una variedad concreta por sus interesantes características. Esta PLANTA-Lobularia posee una floración intensa, es productora de polen y néctar, y tiene un follaje perenne y abundante, se adapta muy bien a diferentes tipos de suelo y es resistente al calor y la sequía. Además, ejerce una doble función, ofrece refugio y alimento a los depredadores y parasitoides, pero también actúa como planta trampa, alejando del cultivo otras plagas como el trips.
Además, en el caso del control del pulgón, contar con un diseño adecuado de plantas para el control conservativo juega un papel estratégico. Y Agrobío está trabajando con un mix de diferentes especies arbustivas autóctonas de pequeño crecimiento para crear islas de biodiversidad y así apoyar la función de la Lobularia. Este pack ofrece otros recursos que completan las necesidades de la fauna auxiliar y mejoran sus capacidades frente a la llegada de las plagas.
Este servicio que Agrobío ha puesto a disposición del productor está siendo la llave para obtener un fruto de máxima calidad en cultivo ecológico y biodinámica, pero también en convencional; es eficaz contra el pulgón y permite reducir la aplicación de fitosanitarios y lograr la seguridad alimentaria en las producciones.