Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos, en el marco del informe presentado por el grupo de Diálogo Estratégico, lamenta que se haya perdido la oportunidad para llevar la política agraria a un campo más relacionado con la realidad de quienes trabajan en ella.
Unión de Uniones, ante la presentación del informe final ‘Una perspectiva compartida para la agricultura y la alimentación en Europa’, muestra su decepción ante las recomendaciones planteadas después de 6 meses de trabajo, calificándolas de literatura fácil y con poco fundamento.
La organización cree que el informe hace uso de muchos lugares comunes que ya se han visto recogidos innumerables veces en documentos anteriores. “Es la misma música de siempre, solo que esta vez cargando un poco más el bombo en la sostenibilidad y la resiliencia”, opinan desde la organización que consideran que el informe “dice a todos lo que cada uno quiere oír con las suficiente generalidades como para que luego la Comisión proponga lo que quiera”.
Unión de Uniones sí que constata, no obstante, que el informe se alinea con la posición de la organización en las cuestiones de financiación de la PAC, resaltando que para ser medioambientalmente ambiciosa y para mejorar la competitividad del sector la UE tiene que dedicar más recursos dentro de la PAC y fondos adicionales a esta política. “El presupuesto de la PAC lleva de hecho congelado reforma tras reforma y los agricultores y ganaderos nos estamos comiendo el incremento de costes por las mayores exigencias y la subida del coste de la vida”, por lo que esta sí que sería “una recomendación revolucionaria respecto a lo que hemos vivido hasta ahora y a la que las instituciones deberían hacer caso”.
Apuesta por la dieta vegana y ausencia de cláusulas espejo
En el extremo opuesto, de recomendaciones que a Unión de Uniones les parecen peligrosas, la organización señala la de fomentar, con motivaciones ambientales, una dieta «equilibrada, saludable y que requiera menos recursos», a la par que «accesible, asequible y atractiva»; lo que acaba traduciéndose en una recomendación de apoyo a las tendencias de consumo que reducen la ingesta de proteína de origen animal (o sea, carne, básicamente) y apostar dietas veganas y sucedáneos. “Esto supone un nuevo ataque a nuestro sector ganadero, que es vital para el mantenimiento de las economías rurales”, alertan.
La organización también considera que el informe es «muy medroso» en sus recomendaciones sobre la política comercial europea recomendando sólo que se garantice una mayor coherencia entre la política comercial de la UE y la sostenibilidad, indicando que la Comisión debe reconocer mejor la importancia estratégica de la agricultura en las negociaciones comerciales y revisar, tanto sus estrategias, como su evaluación de impacto en los acuerdos y tratado.
Sin embargo, no aparece la recomendación de adoptar cláusulas espejo en los acuerdos y tratados comerciales, que sería la forma de evitar la competencia desleal en las importaciones que están provocando impactos negativos claros en las producciones europeas. Unión de Uniones considera que poner en marcha las cláusulas espejo tiene más de voluntad política que de dificultad legislativa y lamenta que en algo tan sencillo el grupo de trabajo no haya puesto el acento.
“Las cláusulas espejo ni están ni se las espera”, comentan desde la organización. “Podría ser una recomendación decidida y clara y si en 6 meses de trabajo no han sabido verlo es que algo falla”, añaden.
La organización se muestra expectante ante la formación de comisarios y confía en que haya un mayor diálogo y escucha activa hacia los agricultores y ganaderos de los estados miembro.