Rentabilidad para el productor y sabor para el consumidor
Viveros Verón es una empresa familiar, con más de cien años de historia en los que tradición e innovación van de la mano. Su leitmotiv es sencillo a la vez que contundente: “El éxito no es sostenible si solo se define por lo grande que llegas a ser. El único número que importa es el uno. Una planta. Un cliente. Un pedido. Una experiencia cada vez”.
Ubicada en Calatayud (Zaragoza), la empresa es especialista en la producción de frutales de alta calidad principalmente de las variedades del programa de obtención VIF Internacional, cuyo objetivo, en la obtención de variedades de fruta de calidad, es doble: ofrecer rentabilidad para el productor y sabor para el consumidor, dando así respuesta a dos de los eslabones más importantes de la cadena de valor.
Así lo explica la CEO de Viveros Verón, Chus Verón, que ya es la cuarta generación en la empresa. “Apostamos por la calidad buscando variedades que se adaptan a las necesidades del productor”. En los inicios, cuenta Verón, observaron muchos programas de frutales que venían de EE.UU. y Francia, pero la realidad de la fruticultura española era muy diferente. Por ello, desarrollaron un programa de obtención para centrarse en ese doble objetivo, para obtener una fruta más sabrosa y crujiente.
Viveros Verón es una empresa familiar con 105 años de historia, que ya suma su cuarta generación
Rentabilidad del productor
Verón señala que la fruticultura española se sitúa entre las menos rentables del mundo, de ahí la importancia del trabajo que desarrollan. “Son variedades con menores costes de producción para el fruticultor en cuanto al trabajo de poda y aclareo que necesitan, con una maduración homogénea y larga postcosecha, lo que da mayor rentabilidad al agricultor”, indica. Las variedades del programa VIF Internacional, explica Verón, alcanzan rápidamente el nivel de grados brix y coloración apto para consumo, lo cual permite, que, aun recogiendo en verde, el consumidor reciba una fruta de calidad. Y por otro lado son fáciles de manejo en el cultivo y con floraciones tardías que reducen los riesgos de pérdida de cosecha por heladas.
Verón señala que la fruticultura española ha de poner en valor el gran trabajo en innovación que está desarrollando
Gama varietal completa
“El consumidor quiere sabor y fruta bonita y para ello hemos creado gamas de fruta homogénea durante toda la campaña de recolección. Nosotros conseguimos, por ejemplo, que una nectarina de inicios de campaña, en junio, sea igual que una del final, en septiembre, es decir, que el consumidor vea que está comprando la misma calidad de nectarina durante cuatro meses”, afirma Verón, que cree que es necesario poner en valor y transmitir mejor al consumidor lo que está haciendo el sector agrícola en España y que entienda todo el trabajo y la apuesta por la innovación que hay detrás de cada fruta que consume.
Viveros Verón produce albaricoque, almendro, cerezo, ciruelo, manzano, melocotón, nectarino, paraguayo, peral e, incluso frutales para jardinería, árboles ornamentales y aromáticas. Además de comercializar en España, cuenta con un amplio mercado internacional en los cinco continentes.