Posteriormente, acabó siendo presidente de una de las principales cooperativas de la provincia, Granada La Palma, cuyos inicios recuerda con ilusión: “Teníamos una cooperativa consolidada en el mercado y muchos retos por delante”.
Fueron dos los hitos que marcaron el devenir de esta entidad y del propio Ruiz: la constitución de la OPFH, que les permitió dar un salto cualitativo en competitividad y producción; y, en 2009, ampliaron las instalaciones con una gran inversión que fijó los ejes de su crecimiento: la calidad y la experiencia de consumo, apostando por la segmentación en mini vegetales, y el desarrollo de un tomate con sabor y mayor calibre, que ha sido un éxito en más de 40 países.
Otro de los pilares que Pedro Ruiz tiene en mente al hablar de su trayectoria son los agricultores. “Gracias a la profesionalidad y la confianza de nuestros productores, hemos podido mantener ese enfoque innovador”, sostiene, y sabe que cada movimiento que realiza marca el futuro de muchas familias. En este 2021 cumple 15 años al frente de una cooperativa que sigue incansablemente buscando y ofreciendo nuevas experiencias y conceptos de consumo, con la calidad por encima de todo.
Muy cercano al consumidor, el presidente de La Palma hace una escucha activa de su comportamiento, asume que quiere probar cosas nuevas, buscando comer sabroso y sano, y, por ello, llevan tiempo trabajando en esa dirección: de calidad, sencillo, saludable. “Estamos comprometidos con la salud de las personas”, afirma.
Entre sus próximos proyectos, nos adelanta que tienen prevista la construcción de una planta de producto elaborado que les permitirá desarrollarse en el segmento de la IV y V Gama.
Los valores que siempre han regido su trayectoria son el compromiso y la actitud positiva, que considera fundamentales en cualquier ámbito de la vida: “En estos tiempos tan complicados, transmitir ilusión y confianza resulta más importante que nunca”.
“EN ESTOS TIEMPOS TAN COMPLICADOS, TRANSMITIR ILUSIÓN Y CONFIANZA ES MÁS IMPORTANTE QUE NUNCA”
Igualmente, manda un mensaje al sector de autoexigencia y confianza en el potencial que tienen nuestros productos, sus bondades, calidad, oportunidades, con el objetivo de que los consumidores reconozcan y valoren las frutas y hortalizas.
Al preguntarle por sus referentes, prefiere no citar nombres concretos porque, dentro del mundo cooperativo, ha conocido a muchas personas dignas de admiración: presidentes, miembros de consejos rectores, directivos… profesionales muy comprometidos, con capacidad de innovar, motivar y dignificar este sector. Sí destaca el potencial humano que lo compone y que define como la gran fortaleza del sector.