Las violentas protestas de los chalecos amarillos en Francia está pasando una alta factura a los productores nacionales de frutas y hortalizas. Empresas productoras de frutas tropicales denuncian, en declaraciones la Revista Mercados, que la incertidumbre creada por el bloqueo de carreteras está suponiendo la cancelación de hasta el 30% de los pedidos en la última semana, la tercera de movilizaciones galas en el fin de semana. Los productores aseguran que la campaña de Navidad, la más alta de exportaciones para sectores como el citrícola, esta ya «gravemente afectada» por el estallido social en el país vecino, pero todavía confían en que los pedidos se puedan reactivar la semana que viene, la previa a las fiestas.
Sin embargo, los empresarios no ven muy claro que las medidas anunciadas por el Gobierno francés vayan a calmar los ánimos de los chalecos amarillos, y miran con temor lo que pueda ocurrir el próximo fin de semana. «Está por ver todavía que las movilizaciones vayan a concentrarse en la capital o que se trasladen nuevamente a las fronteras y a carreteras importantes, lo que sería un nuevo golpe para la campaña», señalan fuentes del Comité de Gestión de Cítricos (CGC). En este sentido, advierten que si vuelven a reproducirse el bloqueo de carreteras por cuatro fin de semana consecutivo «el daño sería mayúsculo», aunque las pérdidas concretas todavía están por evaluar.
Miedo e incertidumbre
La misma preocupación la comparten las empresas de frutas tropicales. Desde la firma Axarfruit, su gerente, Alvaro Martínez, asegura que las protestas están afectando al consumo y por lo tanto a los pedidos desde Francia, que en el caso de su empresas han caído del 20 al 30% en esta última semana. «La gente tiene miedo y eso altera sus hábitos de consumo y la gran distribución también rebaja los encargos por esta menor demanda y porque no sabe cómo y cuándo van a llegar las mercancías«, añade Martínez. Las vísperas de la Navidad es una temporada alta para la venta de frutas tropicales en Europa, una tendencia que se ha visto claramente truncada este año por la revuelta social en Francia.
En la misma línea, otra empresa del sector de tropicales, Natural Tropic, también está sufriendo un recorte de los pedidos en la misma proporción. «Los clientes que iban a pedir cinco palés esta semana se han quedado finalmente en dos», asegura Prudencio López, que no tiene muchas esperanzas de que los chalecos franceses vayan finalmente a abandonar las protestas por las cesiones del Gobierno galo.
El sector hortofrutícola contiene así la respiración a la espera de que llegue el fin de semana y el movimiento de protesta pueda volver a tomar las calles y carreteras del país vecino.