A la ampliación y mejora de las instalaciones realizadas antes del arranque de la nueva campaña, sumadas a la adquisición de esta maquinaria, supondrá un aumento de la capacidad de producción de 90.000 kg/día y una mejora en la calidad de la selección, que coloca a la Agrupación de Cooperativas Valle del Jerte como líder europeo en producción por calibrado óptico.
La máquina adquirida es la Calibradora Óptica Cherryway, una calibradora de 8 líneas, digital y con control de calidad. Se trata de la más rápida del mercado, y está especialmente diseñada para frutas de pequeño tamaño. El objetivo del calibrado es seleccionar la fruta en función de diferentes parámetros como el diámetro, la longitud o forma del fruto, estableciendo así distintos tipos de calibres. Este proceso es posible gracias al sensor GLOBALSCAN CHERRY que sirve para analizar el color, el diámetro, la forma y la calidad interna y externa de las cerezas.
El sistema ORPHEA completa la solución ofrecida por la calibradora permitiendo controlar el destino final de la fruta atendiendo a los diferentes criterios de selección posibles y garantizando así su perfecto envasado. Con esta nueva calibradora, la Agrupación suma cuatro en sus instalaciones, obteniendo así la mayor capacidad de producción en el sector europeo. Pero no es la única mejora realizada de cara a la nueva campaña, y con vistas a un futuro a largo plazo.
La cámara de enfriamiento se ha ampliado en 1.250 m2, en los que se incluyen dos muelles de descarga de 30 m2 cada uno, una zona de recepción refrigerada de 270 m2 y tres pistas de hidro-enfriamiento automatizadas con una capacidad de enfriamiento de 70.000 kg/hora/pista. Además, dentro de esta nueva zona, también se ha instalado una nueva cámara de almacenamiento de fruta fría de 840 m2 y 6 metros de altura. Por otra parte, hay que añadir una explanada exterior de 6000 m2 para almacenamiento y logística de envases con vial de acceso.
La Agrupación de Cooperativas Valle del Jerte siempre se ha esforzado por contar con las últimas tecnologías del mercado para mejorar la calidad de su producto. Este sistema de selección óptico permite optimizar el triaje del fruto, llegando incluso a detectar pequeños defectos en la superficie de las cerezas, mejorando de forma notable la selección de la fruta por calidad de la misma, no solamente por calibre.