Las herramientas de Koppert para actuar frente al anticipo de la Tuta en el tomate
Es imprescindible actuar ya frente a una plaga que se ha adelantado a la primavera.
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Reforzar ahora las dosis del chinche depredador Nesidiocoris tenuis (Nesibug) es la mejor estrategia para proteger el cultivo de tomate frente a la plaga de Tuta absoluta, que no ha dejado de estar presente durante todo el año debido, entre otros motivos, al incremento de las temperaturas medias durante el invierno. Las sueltas de refuerzo de Nesi dependerán siempre del nivel de población actual que presente en el cultivo y de cómo haya sido su instalación. En aquellos casos en los que la instalación de Nesi haya sido óptima, será necesario al menos proporcionarle alimentación extra durante los meses de invierno para mantener en buen estado su vitalidad y su capacidad para poner huevos.
La alimentación extra de Nesidiocoris es la mejor estrategia para paliar los efectos del frío y asegurarse de que la capacidad reproductiva de este enemigo natural no disminuye durante el invierno. Para conseguir este objetivo, Koppert recomienda llevar a cabo un programa de alimentación con Entofood (huevos de la polilla Ephestia kuehniella y quistes de artemias aplicados sobre las plantas de tomate). La alimentación extra con Entofood también es imprescindible si se llevan a cabo las sueltas de refuerzo, ya que es imprescindible facilitar a Nesidiocoris una fuente segura de alimento durante los meses en los que la presencia natural de Tuta escasea.
Aumenta la fertilidad
Hay que concentrar las sueltas de Entofood en las zonas más tiernas y donde más luz recibe la planta porque son los lugares que Nesidiocoris prefiere para vivir. De esta forma, el enemigo natural de la Tuta recibe un alimento muy nutritivo, pura proteína. Está demostrado que Entofood aumenta la fertilidad de las hembras. Por tanto, con esta alimentación extra se consigue aumentar el número de puestas de huevos y, de cara a la primavera, la población de Nesidiocoris será mucho mayor.
Koppert recomienda completar la estrategia preventiva de control biológico de Tuta en tomate con placas negras Horiver, colocadas preferentemente cerca del suelo, para capturar ejemplares adultos. También es recomendable sembrar plantas de Lobularia marítima, comercializadas por Koppert, para fomentar la presencia espontánea de Necremnus tutae, una avispa parasitoide de las larvas de Tuta.