La patata sigue su tendencia alcista en la Lonja de León, la confluencia de una oferta interior escasa y de una baja calidad en la patata de importación ha vuelto a tirar al alza de los precios. Treinta euros por tonelada subieron las variedades agrias —que se sitúa ya en los 400 €/t— y Kennebec, que arrastraron a subidas más moderadas, de veinte euros tonelada, en las demás variedades cotizadas.
Recordemos, no obstante, que la variedad agria se despidió la pasada campaña en la misma lonja leonesa, en abril de 2024, a 480 euros/tonelada. Por ello, la evolución del precio seguirá dependiendo de si la calidad de la producción importada recupera crédito para la exigencia de la industria, máxime con la actual tendencia en España de retroceso del consumo de patata fresca y de aumento de la patata congelada y procesada.