Extremadura enfila la recta final de la campaña de fruta de hueso. Prácticamente finalizada la comercialización de melocotón y nectarina, se recoge ahora la última variedad de ciruela, en un año donde la producción de esta fruta se ha reducido más de un 50%.
La adversa climatología que se registró en las Vegas del Guadiana (Extremadura) durante la pasada primavera e inicio del verano, han condicionado la campaña de producción comercialización de fruta de hueso que está a punto de finalizar.
Melocotón y nectarina
Centrándonos en melocotón y nectarina, el ejercicio comenzó con retraso y algunos problemas de calidad en las primeras variedades, lo que se dejó sentir en los mercado. «Sin embargo, una vez se solventaron esos defectos, los clientes en destino han reaccionado bien ante la llegada de nuestra fruta, con agilidad en los envíos y precios correctos», nos explica Miguel Ángel Gómez, gerente de Afruex
En cuanto al volumen de estas dos frutas, Extremadura, a falta del cierre oficial del ejercicio, alcanzará una comercialización entorno a las 120.000 Tn, un 80% de su potencial productivo (150.000 Tn).
La ciruela
Con respecto a la ciruela, en estos momentos están recogiendo la última variedad, Ángelo, una fruta que permite una comercialización más pausada al poder conservarse en cámaras durante un par de meses. «Al igual que en melocotón y nectarina, las lluvias de primavera y varios episodios de granizo, causaron importantes mermas en su producción y calidad, aunque en este caso los daños han sido mayores«, comenta Gómez.
En este sentido, desde Afruex, y en declaraciones en exclusiva a la revista Mercados, apuntan que la producción rondará las 60.000 Tn, cuando su potencial es de 130.000 Tn. «Casi no llegamos al 50%, por lo que consideramos que ha sido una campaña complicada», argumenta el gerente de Afruex, aunque reconoce que los mercados han reaccionado bien ante la fruta de calidad.
Mercados extraeuropeos
Para la ciruela, destinos como Brasil, México o China se han posicionado como tendencias en crecimiento. Sin embargo, la escasa producción de esta campaña ha provocado que prácticamente los envíos a dichos mercados hayan sido casi nulos, redirigiéndose toda la comercialización a países europeos.
