La diversidad en Cuna de Platero es ya una realidad

La fresa es el producto estrella de Cuna de Platero desde que se constituyó en 1988. Sólo dos socios, de los 80 que integran la cooperativa moguereña, no cuentan con ninguna hectárea dedicada al cultivo de este extraordinario fruto rojo. Pero esta proporción puede ir variando en los próximos años ante el paulatino aumento de las superficies que se destinan a otras berries, como la frambuesa y el arándano.

El director gerente de Cuna de Platero, Juan Báñez, ha confirmado este proceso de diversificación en el que se encuentra la sociedad agrícola. “Si en 2014 las fresas supusieron casi el 88% de la producción, las previsiones apuntan a que este porcentaje puede situarse en torno al 80% en la próxima campaña. Y la tendencia es que se reduzca aún más, porque las frambuesas y los arándanos pueden acaparar en breve entre el 20% y el 15% del volumen total, ante el incremento de hectáreas de estas berries que se está registrando entre los socios”.

Es más, los datos certifican este cambio. De las 770 hectáreas de fresas que Cuna de Platero contabilizaba durante la campaña 2013/14 se ha pasado a 710 en la actual, y de los 60 millones de plantas que se utilizaron durante el año anterior se ha pasado en 2015 a los 54 millones. Por el contrario, de las 50 hectáreas de frambuesas en 2014 se han pasado a las 65 este año y la previsión es que en 2016 entren en producción otras 30 hectáreas más. En cuanto a arándanos, la superficie controlada por la cooperativa ascenderá la próxima campaña a unas 80 hectáreas.

La tendencia, según apuntó Báñez, es que las hectáreas de fresas no vuelvan a aumentar, “todo lo contrario, se estabilizarán e incluso se reducirán dependiendo de los resultados de esta campaña que está a punto de finalizar”.

Campaña “intermedia”

Para el director gerente de Cuna de Platero, la campaña de 2015 “se podría calificar como“intermedia”, porque no alcanzará los resultados de 2011 y 2012, pero no se prevé tan mala como las de 2013 y 2014. Ha sido correcta y aceptable hasta el pasado mes de marzo, pero después de Semana Santa se entró en un bache profundo donde el kilo de fresa no superaba los 50 céntimos. Durante las últimas semanas hemos tenido la sensación de que los precios se estaban levantando un poco. Si se mantiene este nivel hasta el final y hacemos un volumen razonable de ventas, es posible que esta campaña la cerremos con resultados mejores que las dos últimas, pero seguro que será peor que los datos registrados en 2011 y 2012”.

En este sentido, Báñez estima que la producción de este año de la cooperativa se aproximará a los 30 millones de kilos de fresas. “Si no alcanzamos esta cantidad será porque el mes de mayo ha sido un desastre y en los mercados no se ha comprado fruta”. Si se cumplen los objetivos, la facturación de Cuna de Platero podría ascender en 2015 a unos 45 millones de euros por la venta de fruta en fresco. A este montante habría que añadir otros 3 millones por los 12 millones de kilos de fresas (casi un 20% de la producción) que se destinarán a la industria.

Cuna de Platero no tiene firmado ningún acuerdo de exclusividad con ningún obtentor de fresas, pero si recomienda a sus socios plantar determinadas variedades, siempre y cuando posean unas características muy concretas: que la vida poscosecha sea buena, es decir que lleguen bien a los mercados, y, sobre todo, que tengan sabor, “porque el camino va por ahí”, precisó Juan Báñez. No obstante, el director gerente matizó que la cooperativa recomienda las variedades que ofrece Fresas Nuevas Materiales (FNM), porque además de participar en el accionariado de esta empresa, “las opciones que ofrecen se adaptan al perfil de nuestros clientes”.

La producción de berries se destina casi por completo al mercado europeo, donde destacan Alemania, con un 45%, Francia (15%) e Italia (15%). Báñez reconoce que el mercado inglés “es la asignatura pendiente” y los nuevos destinos que la cooperativa está trabajando son los países nórdicos. En España se queda entre el 15 y el 20% de las fresas que se recolectan durante la campaña, aunque este porcentaje ha ido creciendo en los últimos años.

Berrycatesen

Hasta ahora Cuna de Platero comercializa sus productos a través de distintas marcas (Fuentepiña, Cuna, Platero…), pero la tendencia es unificar y quedarse con dos o tres distintivos. “Lo que queremos es dejar la marca Berrycatesen para los productos considerados Premium, los que destaquen sobre los demás por tener características especiales en cuanto a sabor, grados Brix y tamaño de la fruta. Por ejemplo, en frambuesa trabajamos la variedad ‘Adelita’, de Planasa. En arándanos, moras y fresas estamos estudiando las propuestas que nos están llegando y nos decidiremos cuando encontremos una fruta que se diferencie de las demás”.

Jornales

Cuna de Platero también cuenta con una producción de frutas de hueso. En concreto, comercializa el melocotón amarillo. Pero como está ocurriendo con las fresas, las hectáreas también se están reduciendo. De las 60 que se destinaban al cultivo de esta variedad, tan sólo quedan en la actualidad unas 17, que según las previsiones producirán unos 200.000 kilos.

Por lo que respecta a la mano de obra, la cooperativa moguereña da trabajo a unas 6.800 personas en plena campaña, lo que representa unos 500.000 jornales al año. Un potencial económico y laboral que, según asegura el director gerente de Cuna de Platero, no se valora como se debiera. “La mayoría de los ciudadanos no conocen lo que aportamos ni lo que dejamos de aportar. No existe una vinculación directa entre la actividad que desarrollamos y la sociedad, sobre todo la más cercana. Solo conocen que hay un tiempo para trabajar en el campo y en los almacenes, y poco más”.

Para intentar corregir este desencuentro, Cuna de Platero está estudiando la posibilidad de abrir una tienda en las instalaciones de la cooperativa donde vender fresas, arándanos y frambuesas en plena campaña, realizar unas jornadas informativas en los colegios de Moguer y provincia y está participando en la iniciativa ‘Exquisitamente’, que promueve el restaurante Terranova de la capital onubense.

Fuente: agrodiariohuelva.es