El responsable de Recursos Humanos de la cooperativa, Iván Romero, ha informado a EFE de que con los trabajadores se han pactado distintas reducciones de jornadas, que van de los dos a los cuatro días a la semana, en función del área en que se encuentren, pero ha concretado que afecta, con mayor o menor intensidad, a toda la plantilla.
De esta forma, desde el viernes, el personal de administración, fábrica, mantenimiento, operarios de manipulación o cualquier otro puesto acuden con distintos horas alternos, mediante un ERTE que plantea también suspensión de contratos temporalmente en algunas parcelas de la empresa.
El mismo portavoz ha indicado que, a pesar de las lluvias caídas la semana pasada, ha habido que tomar esta edición, entre otras cosas porque la sequía ha impedido llevar a cabo la campaña del tomate, genera unos 60 millones de euros por temporada.
La menor producción de coliflor y brócoli, como ha ocurrido en otras regiones de España, también ha sido determinante para que los ingresos no hayan llegado y se haya tenido que tomar esta decisión.
En 2021, desde su inicio a mediados de julio, y tras dos meses aproximadamente de duración, la cooperativa agrícola andaluza recolectó un total de 184.000 toneladas de tomate fresco, que tras su paso por fábrica se transformaron en 40.000 mil toneladas aproximadamente de concentrado de tomate, mediante la fabricación de hasta nueve productos diferentes en base a la concentración demandada por los clientes.
Se obtuvo un rendimiento medio para sus agricultores de 106.000 kilos por hectárea, lo que supuso un resultado según las estimaciones previstas antes del inicio de campaña, lo que no se ha podido alcanzar este año.