La globalización y la deslocalización son principales peligros para los cítricos españoles

Y el problema es que trata de un mercado que se solapa cada vez más con el español, cuyo epicentro se encuentra en la Comunitat Valenciana.

Los datos los proporcionó el pasado viernes Inmaculada Sanfeliu, directora general del Comité de Gestión de Cítricos, en la jornada Reforma de la PAC: Nuevos retos para la competitividad en el sector agrario, organizada en Valencia por el despacho Andersen Tax & Legal. La dirigente, en una minuciosa presentación, recurrió al ejemplo sudafricano para advertir de los que, a su juicio, son «los principales peligros para la producción de cítricos en España: la globalización del comercio y la deslocalización».

«Sobre el papel Sudáfrica realiza un comercio de contrastación respecto a España al encontrarse en el hemisferio opuesto del globo, si bien se producen solapamientos en momentos en los que hay producción en ambos mercados. Sudáfrica, como se hizo aquí en España, está alargando sus periodos de producción con el desarrollo de variedades tardías y tempranas. Y su impacto aquí es algo que tiene su origen en el ‘arancel cero’ que estableció la Unión Europea para el país -no en el último acuerdo, sino en el anterior-. Este año se ha visto claramente el fenómeno con las mandarinas, que es con el producto que más solapamiento se produce producir con Sudáfrica», expuso la dirigente.

En este sentido, Sanfeliu recurrió a las cifras de las plantas que se están vendiendo en Sudáfrica para alertar de que tal circunstancia «puede ir mucho más allá». «La cifra de cítricos se ha duplicado, pero si observamos la de mandarinas vemos que vendieron un millón de plantas en 2012 y que en 2017 fueron 3,36 millones. En este caso se ha triplicado», subrayó. En consecuencia, todo apunta a que los inicios y finales de campaña de los cítricos españoles van a ser cada vez más duros, con una competencia cada vez más importante.

1 de cada 3 mandarinas es española

Sanfeliu hizo además una pormenorizada radiografía del mercado español de los cítricos. Según detalló, a nivel mundial España representa entre el 5% y 6% en la producción de cítricos (entre el 4% y el 5% en la producción de naranjas y entre el 7% y el 8% en la producción de mandarinas), pero los porcentajes aumentan en lo que refiere a las exportaciones. España comercializa entre el 25% y el 26% de los cítricos, entre el 24% y el 27% de las naranjas y entre un 35% y un 37% de las mandarinas. En consecuencia, uno de cada cuatro cítricos y una de cada tres mandarinas que se comercializan en todo el mundo provienen de España, donde la Comunitat Valenciana aglutina el 53% de producción de cítricos del país.

La directora general del Comité de Gestión de Cítricos agregó que España se sitúa entre la cuarta y la quinta posición como productor mundial de cítricos y que es el primer exportador mundial de cítricos en fresco, lo cual evidencia que España ha sabido aprovechar su ingreso en la Comunidad Económica Europea, ya que el país ha pasado de producir 3,5 millones de toneladas hasta alcanzar el récord de producción de los 7,7 millones. En toda la Unión Europea hay 554.000 hectáreas dedicadas a la producción de cítricos, de las cuales 304.000 se encuentran en España, que es, con entre el 58% y el 61% de la producción, el principal productor y comercializador de cítricos de la Unión Europea.

«Hemos aprovechado como nadie nuestro ingreso en la UE. Hay otros productos a los que se les puede haber acusado de haber vivido de la subvención, pero no es el caso de los cítricos. Somos el primer exportador de cítricos en fresco de todo el mundo», remarcó. Ahora bien, dicho dominio, construido gracias al mercado cautivo europeo del que han disfrutado los cítricos españoles, podría correr peligro si proliferan mercados como el sudafricano.

Es por ello que en la jornada se abogó por que la Unión Europea impulse normas en materia de competencia para regular la entrada de productos terceros y lograr que estos compitan en igualdad de condiciones con los locales. Durante su intervención, Esmeralda Iranzo, asociada senior de Andersen Tax & Legal, sostuvo que la Comunitat Valenciana ha sabido aprovechar el empuje de la PAC, «pero el sector debe pedir más en la estructuración de los mercados, que les permita mantener el pulso de la producción y comercialización», defendió, al tiempo que insistió en la necesidad de «aumentar controles en materia fitosanitaria sobre terceros países».

365.000 millones en ayudas

La ponencia que abrió la jornada Reforma de la PAC: Nuevos retos para la competitividad en el sector agrario, corrió a cargo de Gregorio Dávila, representante de la Dirección General de Agricultura y Desarrollo Rural de la Comisión Europea. El dirigente precisó que el presupuesto de la PAC previsto para el periodo 2021-2028 es de 365.000 millones de euros, lo que supone una reducción del 5% respecto a la anterior -circunstancia que puede variar si los jefes de Estado así lo consideran-.

Según explicó, la Comisión trabaja para alcanzar un acuerdo que permita presentar los planes estratégicos en 2020. También destacó los aspectos más importantes de la nueva gobernanza, como son la simplificación administrativa, el enfoque del desempeño para regular también en base a los resultados y la persecución de objetivos comunes en toda la UE a través del desarrollo y la aplicación local en cada país con la contribución de los Estados miembros.

En concreto, el dirigente enumeró los nueve objetivos específicos que persigue la PAC, como son: mejorar la competitividad y orientación al mercado, apoyar la renta agraria y resiliencia de las explotaciones, mejorar la posición de los agricultores en la cadena alimentaria, la mitigación y adaptación al cambio climático, la mejora del desarrollo sostenible y gestión de recursos naturales, la protección de la biodiversidad y paisaje, el atraer a jóvenes agricultores, la apuesta por alimentación y salud, así como la defensa del empleo y crecimiento en zonas rurales.

En la jornada también participaron Rafael Ripoll, of counsel de Andersen Tax & Legal, y Benjamín Prieto, socio y director de la oficina de Valencia. Este último sostuvo que desde el despacho se ha decidido buscar la especialización en sectores como el citrícola, en los que la firma tiene «una amplia especialización». «Por los clientes con los que cuenta y por una trayectoria que nos permite dar un valor añadido en este sector», argumentó.

Fuente: eleconomista.es