Fresón de Palos, la mayor productora de fresas de Europa, ha decidido ampliar la superficie de producción de fresa y berries en la que se aplican estrategias de Gestión Integrada de Plagas (GIP). Con esta firme apuesta empresarial por la sostenibilidad, Fresón de Palos establece el control biológico como método prioritario de control de plagas, con el objetivo de evitar los tratamientos con plaguicidas de origen químico. Como ventajas más importantes frente al control químico convencional, el control biológico no genera resistencias en las plagas y no deja residuos ni en la fruta ni en el medio ambiente.
La implantación de los protocolos técnicos de control biológico de plagas y enfermedades corre a cargo de Koppert, líder mundial en la producción de organismos vivos que, siguiendo su instinto natural, depredan o parasitan a los insectos y microorganismos que afectan a los cultivos. La colaboración con Koppert se inició hace más de un año para realizar las primeras pruebas de control biológico en una superficie reducida y, tras los excelentes resultados obtenidos, Fresón de Palos ha decidido en esta campaña ampliar la experiencia hasta el 20% de la superficie de producción, siendo el objetivo llegar al 100% en las próximas campañas.
La apuesta de Fresón de Palos por el control biológico será visible en el punto de venta mediante un nuevo envase diseñado para poner en valor este nuevo método de producción. “Queremos que todos los eslabones que forman la cadena alimentaria, especialmente los consumidores, sean conscientes de los beneficios del control biológico, ya que es una herramienta 100% sostenible para ofrecer fruta de la máxima calidad y sin residuos”, explica Silvia Gómez, directora general de Fresón de Palos.
Asesoramiento técnico
Fresón de Palos y Koppert han firmado un acuerdo de colaboración que incluye el asesoramiento técnico para implantar el control biológico de plagas como el trips, el pulgón y la araña roja en los cultivos de fresa, frambuesa y arándano. Además, se contempla un programa de formación con la finalidad de dar a conocer la metodología de control biológico al equipo técnico de Fresón de Palos y también a los propios encargados de finca y socios productores.
Para el control de Trips, se utilizan el chinche depredador Orius leavigatus y el ácaro depredador Neoseiulus cucumeris. Para el control de araña roja, se han planificado sueltas del ácaro depredador Phytoseiulus persimilis y para el control biológico de diferentes especies de pulgón se van a realizar sueltas de la avispa parasita Aphidius colemani y del sírfido Predanostrum balteatus.
Además de las sueltas de insectos beneficiosos, Koppert ha diseñado para Fresón de Palos una estrategia de control biológico por conservación, basada en la creación de setos vegetales y en la siembra de plantas refugio. Para ello, se van a utilizar más de quince especies vegetales diferentes, la mayoría de ellas plantas aromáticas autóctonas que atraen de forma natural a los insectos beneficiosos. “Basándonos en nuestra experiencia, queremos crear infraestructuras ecológicas que faciliten la presencia espontánea de enemigos naturales de las plagas, tanto en el perímetro de la finca como en su interior”, explica Gonzalo García, director comercial de Koppert en España occidental.
Koppert: aliados con la naturaleza
Nos aliamos con la naturaleza para encontrar formas de cultivo que sean seguras, saludables y sostenibles. Ayudamos a los productores a apoyar, proteger y fortalecer sus cultivos con un sistema integrado de soluciones naturales. Utilizamos enemigos naturales para combatir plagas, abejorros para la polinización natural, y microorganismos y bioestimulantes que apoyan, protegen y fortalecen los cultivos. Impulsamos la innovación agrícola desde hace más de 50 años.
Los agricultores de todo el mundo utilizan nuestros productos y conocimientos para restablecer el equilibrio natural de sus cultivos. Nuestro enfoque holístico es lo que nos distingue: mejorar la salud de las plantas tanto por encima como por debajo del suelo. Todas nuestras soluciones respaldan un objetivo: una agricultura 100 % sostenible.