La movilización del sector citrícola suma y sigue. La Unión de Uniones ha solicitado este jueves al Ministerio de Agricultura, tras la reunión mantenida con la Directora General de Producciones y Mercados Agrarios, Esperanza Orellana, una ayuda excepcional y con carácter temporal para todos los productores a los que se les quede la cosecha en el árbol sin recoger, en términos muy parecidos a las concedidas por el veto ruso a las exportaciones europeas.
Unión de Uniones considera positiva la retirada de cítricos para industria del Ministerio, pero es totalmente insuficiente y no llegará de forma directa a los agricultores; de ahí que proponga también la medida anterior que «sí beneficia el maltrecho bolsillo del productor». Esta medida excepcional está contenida a nivel técnico en «la renuncia a efectuar la cosecha de cítricos a las organizaciones de productores del sector de cítricos y a los productores que no sean miembros de dichas organizaciones». Esto ya se estableció en el Reglamento Delegado (UE) 2017/1165 de la Comisión de 20 de abril para paliar los efectos del veto ruso. Para garantizar la desnaturalización de la misma -evitar que se estropee la fruta-, tal y como se establece en el artículo 31 del Reglamento de Ejecución (UE) 2017/892 de la Comisión de 13 de marzo de 2017, se debería tirar la cosecha al suelo.
Además de esta medida, se ha instado a impulsar a través de la Federación Española de Municipios y Provincias una exención del Impuesto de Bienes de Inmuebles (IBI) de todos los bienes afectos a la actividad citrícola, así como establecer una reducción de los índices de rendimiento neto para el sector citrícola en el IRPF del ejercicio 2018 o fomentar el acceso a líneas específicas de financiación del sector citrícola a través de la Sociedad Anónima Estatal de Caución Agraria (SAECA).
Por otro lado, Unión de Uniones ha cuestionado el posicionamiento del Gobierno y en particular de la ministra de Economía, Nadia Calviño negándose a establecer la cláusula de salvaguarda que «parece más una responsable ministerial de Sudáfrica que española, porque sólo los agricultores de la Comunitat Valenciana han perdido en esta primera parte de la campaña la friolera de 134 millones de euros, fundamentalmente por la saturación de cítricos sudafricanos en los mercados europeos según los datos»
En este sentido, la organización ha demandado renegociar los tratados internacionales con incidencia en el sector citrícola español para establecer en ellos una reciprocidad real de las normativas europeas en materia fitosanitaria, medioambiental y laboral a las producciones agrarias procedentes de países terceros; así como exigir la implantación del tratamiento en frío en tránsito a todos los cítricos procedentes de países terceros con plagas de cuarentena.