El ajo presenta un diferencial cercano a un 800% entre el campo y la mesa
La presión se endurece al final de la campaña sobre el productor, cuyo margen se reduce a llegando casi a igualarse coste y precio de venta.
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La campaña del ajo encara su recta final y los agricultores están percibiendo precios muy bajos, que apenas cubren sus costes de producción. En el caso del ajo blanco, con la campaña ya terminada, el precio en origen se sitúa en 0,59 €/kg, cuando sus costes de producción están en torno a 0,55-0,60 €/kg
Esta situación se repite con un producto tan valorado (segmento gourmet) como el ajo morado, que todavía está en proceso de recolección, y que tiene un coste de producción de 0,75-0,80 €/kg, a lo que hay que sumarle unos 0,07 €/kg por las labores de clasificado. Sin embargo, el precio que se está ofreciendo a los productores está en 0,85 €/kg.
No podemos olvidar que se trata de un sector muy social, que genera mucha mano de obra (más de 200.000 jornales por campaña) en las zonas productoras.
Andalucía cuenta con más de 5.000 hectáreas de ajo, con una producción que en 2017 superó las 63.000 toneladas.
También hortalizas como el brócoli, la berenjena y calabacín superan el 800% de diferencial de precio entre origen y destino.
Fuente: COAG ANDALUCÍA
