El precio no va al agricultor. Esta campaña se unen varios factores: merma de producción, de calibre y un importante incremento de costes. El precio del producto está subiendo, sin embargo, no se ve reflejado en la liquidación al agricultor porque no va a cubrir el incremento de costes y, en muchos casos, la falta de producción va a provocar falta de rentabilidad.
Un mercado libre, pero en igualdad de condiciones. Es la idea que desde el sector repetimos una y otra vez, ya que Europa es un mercado abierto a las importaciones de países terceros, pero debería controlarse el hecho de hacerlo en momentos de volumen de producción nacional, y siempre con las mismas exigencias que existen para la producción europea. Tantos nuevos retos, como los que impone la estrategia ‘De la Granja a la Mesa’, deben trasladarse también a la oferta foránea para que podamos seguir siendo competitivos.
No es preciso mayor calidad. Creo en esta afirmación, ya que la falta de rentabilidad de los cítricos no viene porque sea preciso incrementar su calidad, sino por una cuestión de exceso de oferta en determinados momentos. Los cítricos españoles y valencianos están reconocidos y diferenciados en el mercado. La solución pasa por hacer una mayor promoción para incrementar el nivel de consumo y llegar a acuerdos con la gran distribución para que no tiren los precios del producto, convirtiéndolo en un reclamo.
Tratamiento en frío. Desde luego la aplicación por fin del cold treatment para importaciones de países terceros como Sudáfrica en naranja es todo un logro, pero no hay que olvidar que seguimos teniendo el mismo problema mientras no se lleve a cabo este proceso también en mandarinas y pomelos. Al final, lo que se busca es evitar la entrada de plagas que tanto daño han hecho a nuestros cultivos de cítricos y caqui, como la falsa polilla y el cotonet. Hay más de 600.000 hectáreas de cítricos en Europa que no deben someterse a ese riesgo.