La campaña de la fresa comenzaba con mucho optimismo entre los agricultores, gracias a los precios al alza tras un buen arranque en los mercados europeos. Además, las variedades más tempranas ofrecían un rendimiento positivo, la alta calidad de la fruta, con fresas de buen tamaño, textura firme y un sabor, muy valorado por las cadenas de distribución.
Las condiciones meteorológicas en ese inicio desempeñaron un papel clave, con un otoño húmedo y lluvias regulares que no afectaron a los cultivos, permitiendo un buen enraizamiento de las plantas, fortaleciéndolas antes de la llegada del invierno.
Caída productiva

La campaña transcurría correctamente hasta la llegada de marzo, cuando las intensas precipitaciones estimaban ya unas pérdidas del 20-30%. Ello provocó un aumento de botrytis y las consecuentes pérdidas en el cultivo. A ello se sumó un segundo problema, la falta de polinización, donde la abeja con condiciones de lluvia no vuela y no realiza sus funciones. Esta combinación provocó un freno en la comercialización en marzo que en la primera quincena de abril ‘explotó’, alcanzando las plantas su máximo momento productivo de la campaña. Tras ello, Freshuelva indica que en las últimas semanas el volumen comercializado ha continuado descendiendo de forma importante, concluyendo que la producción de la fresa de Huelva caerá por cuarto año consecutivo.
Así lo indica el informe de seguimiento del Observatorio de Precios y Mercados, gestionado por la Junta de Andalucía, que apunta a que la producción de fresa se encuentra en retroceso y que, tras tres campañas consecutivas de producción menguante, por cuarta campaña desciende la producción comercializada.
El gerente de Freshuelva, Rafael Domínguez, señaló, por su parte, que la campaña apunta un 30% por debajo del año anterior, si bien abril y mayo han sido muy productivos “no se ha recuperado lo perdido”. Por suerte, comenta, los precios sí han acompañado en las últimas semanas, con bastante demanda en casi todos los mercados de Europa.
El mes de mayo, además, se está caracterizando por ser un mes con alta competencia de otros sustitutivos como la cereza o la fruta de hueso, así como con la competencia en el arándano y la frambuesa, ya que otros países como Francia, Alemania e Italia, también son productores.
En cuanto a variedades, el Grupo de Fresa del Ifapa anunció que Marisma y Red Sayra, con un 24,6% de las fresas cultivadas, son las mayoritarias este año en la provincia.
Frambuesa y arándano
En cuanto a la recolección de frambuesa y arándano, el Observatorio destaca un comportamiento muy similar en ambas frutas tanto en oferta como en demanda. Durante todo el mes, los precios se han mantenido bastante estables, sin grandes picos ni descensos significativos, y sin semanas marcadas por un aumento notable de la producción. La campaña ha mostrado una producción muy regular, con una oferta que ha ido acompasada a ese ritmo constante.