El Grupo operativo para la reducción de fisiopatías en la cereza CHERRYCARE, es un grupo formado por socios pertenecientes a áreas de investigación científica y tecnológica agrícola, así como a grandes agrupaciones cooperativas y empresariales del sector, como la Agrupación de Cooperativas Valle del Jerte. Se constituyó el pasado mes de mayo, y sus integrantes se proponen sumar su capacidad de innovación y producción para solucionar problemas de producción en los cultivos de cereza.
Tras su reciente creación, el CHERRYCARE se ha reunido para abordar las fisiopatías o daños fisiológicos en la cereza, provocados por diferentes factores, y que tanto merman las producciones en cada cosecha. Además de las diferentes enfermedades y hongos, las fisiopatías más destacadas son el Picado o Pitting, que son depresiones en la superficie de la cereza, provocadas por impactos en el fruto, la mancha acuosa superficial, y el cracking o rajado del fruto. El cracking en concreto es uno de los principales daños que se dan cuando, en temporadas como ésta, la lluvia es excesiva en el periodo de maduración del fruto, y el exceso de humedad acaba provocando de la fruta se raje y se pierda.
En las zonas productoras extremeñas, el problema de la mancha acuosa ha afectado en esta campaña a un 20-30% de la producción. En cuanto al cracking, en Extremadura el porcentaje de daño suele ser menor, aunque dependiendo de la climatología, los cultivos siempre están expuestos. Sin embargo, en otras zonas productoras como Aragón, también representada en este grupo operativo, el problema llega a incidir sobre el 30-40% de la producción en años lluviosos como éste.
En la reunión se ha profundizado sobre el problema que sufren las zonas productoras con la aparición de estas fisiopatías en la producción de cereza y como cada vez es más necesario buscar alternativas medioambientalmente sostenibles encaminadas a la prevención de estos problemas que merman enormemente la cosecha, disminuyen la aceptabilidad por parte de los consumidores y ponen en peligro la viabilidad de numerosas explotaciones.
Como resultado del encuentro se ha propuesto la búsqueda de una serie de soluciones para esta problemática de ámbito nacional, sumando la capacidad de innovación y producción de las siguientes comunidades autónomas: Aragón, Extremadura, Comunidad Valenciana y Región de Murcia.
Para ello los diferentes socios han decidido estudiar el efecto de productos naturales y alternativos como elicitores (ácido oxálico) y melatonina sobre la estructura celular de la epidermis y el mesocarpo exterior, así como sobre los sistemas antioxidantes del fruto. Y también validar a gran escala el uso productos a base de calcio empleado solo sustancias aprobadas para su uso en alimentos resultados. Por último, se ha planteado realizar una clasificación de las variedades más sensibles a sufrir este tipo de fisiopatías.
La Agrupación de Cooperativas Valle del Jerte aporta la visión del sector en Extremadura, así como su experiencia en I+D en cuanto al tema de la mancha acuosa, una de las fisiopatías que más afectan a nuestras explotaciones. Junto a la Agrupación, en este grupo participa el CTAEX contratado por la misma como agente de innovación. Además, el Grupo operativo para la reducción de fisiopatías en cereza CHERRYCARE, está compuesto por los siguientes socios: La Estación Experimental de Aula Dei (EEAD-CSIC), que además participa como coordinador, la Escuela Universitaria Politécnica de la Almunia (EUPLA), el Centro de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de Extremadura (CICYTEX), la Universidad Miguel Hernández (UMH), Frutas Latorre, Frutas Interlazaro y Frutas Finca Toli.