Oír hablar de que “los lobbys de ONGs medioambientales dirigen la política agrícola en la UE” es ahora mismo una forma de justificar que no son necesarios los cambios que está realizando la Comisión Europea de Agricultura ante la realidad de un cambio climático que altera todo en el sector agrícola.
No estoy muy de acuerdo con que los cambios son excesivos, creo que son necesarios, pero necesitan del apoyo y la financiación por parte de las administraciones, ya que la situación actual requiere de actuaciones contundentes y sin demora. La sostenibilidad debe ser nuestro guión en los próximos años y, para conseguirlo, debemos adaptarnos a los cambios. Está claro que la Comisión pretende que de la noche a la mañana esto se produzca y no está el sector preparado para esos cambios sin un respaldo. El objetivo es el mismo para todos, pero creo que no las formas en las que se está llevando a cabo, y en eso creo que es donde tenemos que poner todas nuestras fuerzas.
No podemos perder la bandera de la sostenibilidad y, por supuesto, el respeto y cuidado del medio ambiente, porque somos los primeros interesados, porque sin tierras para cultivar no podremos existir y está claro que esto se consigue con un equilibrio para que el medio ambiente no salga perjudicado.
La lucha no está en que desaparezcan las políticas medioambientales de la UE, sino en que sean consensuadas y coordinadas con todo el sector y no consista en poner normas y burocracia que no se pueden llevar a cabo sin apoyo ni financiación. Luchemos por un mundo en el que todos tengamos conciencia de que lo que nos rodea y lo que nos alimenta es de todos y lo debemos cuidar entre todos.
La lucha por la sostenibilidad integral nos hará mejores y dejaremos un mundo mejor para las nuevas generaciones.