Cuna de Platero se decanta por variedades menos demandantes de agua y más resistentes a enfermedades
Cuna de Platero realizó hace muchos meses la planificación de plantas en viveros, que serán las que luego se planten en Huelva. La empresa se ha decantado por variedades más resistentes, que llaman “rústicas”: menos demandantes de agua, más fuertes ante enfermedades; etc.
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Esta planificación de la campaña en los viveros se realizó “con total normalidad”, aunque si la sequía persiste en el momento de la plantación, explican que “se evaluará la cantidad de plantas a utilizar”.
En términos de reproducción de variedades, en Cuna de Platero las más demandadas son Rociera, Marisma y Palmeritas. Aunque han asegurado que hay “14 variedades diferentes en los viveros de altura”, lo que requiere una organización cuidadosa para satisfacer las necesidades de cada variedad.
Como el resto del sector, la cooperativa moguereña afronta una campaña marcada por la falta de lluvias y cómo puedan afectar las altas temperaturas al trasplante en Huelva, aunque la planificación de superficie y variedades es similar a los años anteriores.
Desafíos
Debido al cambio climático, en la península ibérica los veranos cada vez son más calurosos y, los otoños, más cálidos, todo esto afecta a la planta, que no evoluciona bien debido a las altas temperaturas, tanto en viveros como en la plantación en Huelva.
Afortunadamente, la situación está siendo diferente en viveros, donde esta campaña no hay escasez de agua. Las lluvias caídas en junio han facilitado que esta cuestión no sea un problema para esta campaña.
Sin embargo, la falta de mano de obra y las limitaciones que tiene el sector fresero en la aplicación de fitosanitarios para las tareas de desinfección, se presentan como factores limitantes a la hora de mantener la rentabilidad del sector. Por ejemplo, han aumentado los costes de personal debido a la falta de alternativas eficaces para llevar a cabo la desinfección de suelos, ha aumentado la presencia de malas hierbas, que ya no desaparecen, y hay que quitarlas a mano.