INTRODUCCIÓN
En España la fruta dulce sigue siendo el subsector que mayor aportación realiza a la Producción Final Agrícola de España con el 24% en 2016, a pesar de ocupar una superficie relativamente reducida (204.000 has) comparado con otros cultivos. Tres especies han liderado tradicionalmente la producción de fruta en España: manzana, pera y melocotón a las que siguen a notable distancia el cerezo, el ciruelo y el albaricoquero. La evolución de la superficie total cultivada de estas especies muestra una estabilidad a lo largo de los años con una ligera disminución en la última década debido a crisis recurrentes en las tres principales especies y en particular del melocotonero. A pesar de su disminución, al igual que el manzano, el peral siguen ocupando un lugar destacado, aunque muy lejos de la importancia histórica de que había gozado en las cuatro últimas décadas del siglo XX, cuando su cultivo fue muy importante en todas las regiones frutícolas españolas, en especial las del Valle del Ebro y Extremadura. En la actualidad la mayor parte de la superficie cultivada de esta especie se sitúa en el Valle del Ebro, encabezando la producción Cataluña y Aragón.
En el presente artículo se realiza un análisis de la situación del cultivo del peral en España, la distribución varietal y la innovación y desarrollo de nuevas variedades.
SITUACIÓN ACTUAL Y EVOLUCIÓN DE LAS PRODUCCIONES
El peral ha sufrido en las tres últimas un retroceso continuado ocupando en la actualidad 19.898 ha, muy lejos de las 36.200 ha de 1985. Las producciones también ha disminuido considerablemente pero menos que en el manzano (Figura 1). Ello ha sido debido a su mejor adaptación a las condiciones climáticas de las principales zonas productoras, caracterizadas por climas secos y calurosos, excepto en algún caso concreto como la variedad ‘Conference’. La regresión del peral viene dada por los problemas que presenta en su producción como son la dificultad de control de vigor, la irregularidad de las producciones y la dificultad de control de plagas como la Psila en variedades vigorosas como ‘Blanquilla’ o ‘Ercolini’. La no disponibilidad del CCC a partir de 1996 supuso la desaparición de una herramienta muy eficiente y de bajo costo que combinado con la aplicación de las giberelinas permitía obtener producciones estables y facilitaba al mismo tiempo el control de la Psila. También frente a este insecto, que constituye la principal plaga del peral, la notable pérdida de materias activas ha dificultado y encarecido su control, en particular en variedades vigorosas. A ello se ha añadido en los últimos años la presencia del fuego bacteriano en todas las zonas productoras de España. Como se ha demostrado en otros países importantes productores de pera como Italia, convivir con esta enfermedad es posible, pero supone un riesgo permanente e implica un encarecimiento importante de los costes de producción en tratamientos, inspección, control y erradicación. En poscosecha la situación actual tampoco es fácil. La no disponibilidad de materias activas para el control del escaldado desde la campaña 2013-2014 supone implementar e integrar nuevas tecnologías como atmósferas dinámicas, ULO extreme, la aplicación del 1-MCP con el problema de evergreen en algunas variedades, o la aplicación de recubrimientos (edible coatings). En definitiva, una problemática creciente para la tecnología de producción y poscosecha que debería ser compensada por unos mayores precios para los productores. Todo ello ha conducido a la sustitución progresiva del peral por otras especies de hueso (melocotonero, cerezo, etc.) mejor adaptadas y de producción más regular y constante en el tiempo.
En las últimas décadas la pérdida de producción del peral y principalmente la del manzano se ha visto compensadas por el incremento de las especies de hueso, en particular del melocotonero que en los últimos 30 años ha casi triplicado las producciones (Figura 1), provocando desajustes estructurales que se han traducido en crisis recurrentes de precios a lo largo del período 2014-2017. Ante esta situación se entrevé como necesario la necesidad de equilibrar la producción con especies como el manzano o peral que fueron muy importantes en España. En esta especie, la mejora de la tecnología de producción (mecanización de las plantaciones, cobertura con mallas antigranizo, etc.) ha posibilitado mejorar su productividad y competitividad. A ello hay que añadir como factor positivo el desarrollo reciente de nuevas variedades bajo la fórmula de “cub”.
La distribución de las superficies (2017) y producciones (media del periodo 2015-2017) correspondientes a las diferentes especies frutícolas producidas en España se indica en la Figura 2. Puede observarse la importancia del melocotonero, tras años de fuerte incremento, seguido por el manzano y el peral en producciones y por el cerezo y albaricoquero en cuento a superficies.
La distribución regional de la superficie cultivada de peral se ilustra en la Figura 1, donde se observa que se sitúa mayoritariamente en el Valle del Ebro, en particular Cataluña, Aragón y Rioja-Navarra, donde se han cultivado tradicionalmente y que juntas aportan el 80% de la producción. En Cataluña se cuenta con la «D.O.P. Pera de Lleida» y se comercializa con la marca “Edenia®”. En La Rioja se dispone de la Denominación de Origen Protegida “Pera Rincón de Soto”. Destacar también la Región de Murcia (Jumilla, etc.) donde se ha dado una alta especialización hacia la variedad ‘Ercolini’ que cuenta también con la Denominación de Origen Protegida “Pera de Jumilla”.
Situación varietal y nuevas variedades
La situación varietal del peral en Europa se caracteriza por una especialización de cada país en muy pocas variedades pero de importancia considerable. Así en el caso de Italia la más importante es ‘Abate Fetel’, en Bélgica y Holanda lo es ‘Conference’ que representa la práctica totalidad de la producción, mientras que en Francia lo son ‘Limonera’ o ‘Guyot’ y ‘Williams’.
En España la distribución varietal en el año 2017 se ilustra en la Figura 2 y pone de manifiesto la importancia de la variedad ‘Conference’, seguida por ‘Blanquilla’, ‘Limonera’, ‘Ercolini’ y ‘Williams’. La evolución de las producciones muestra una tendencia decreciente desde el año 2002 hasta la actualidad (Figura 3). Las décadas de los años 80 y 90 se caracterizaron por la importancia de ‘Blanquilla’, variedad que durante dos décadas fue la más producida, la más popular y la más valorada por su excelente calidad gustativa, a condición de que tanto la fecha de recolección como el posterior período de frigo-conservación fueran los adecuados. El mayor cambio varietal experimentado desde los años 80 hasta la actualidad se debió a la irrupción de la variedad ‘Conference’ a finales de los años 70, que iniciaría un fuerte desarrollo hasta el inicio de los años 2000, cuando se convirtió en la primera variedad producida en España y que actualmente representa casi la mitad de la producción (Figura 3). Esta variedad cuenta con zonas de producción muy especializadas (Valle del Ebro, León, etc.) con condiciones edafo-climáticas adecuadas para obtener producciones de calidad. A pesar de ello y por motivos diversos, los rendimientos obtenidos son muy inferiores (hasta un 60% en algunas plantaciones) con respecto a los de Holanda o Bélgica, lo que resta competitividad a nuestras producciones.
Con respecto a la innovación varietal, en el marco del programa de evaluación de variedades y patrones del IRTA en Cataluña, se han evaluado 150 nuevas variedades en el período 1994-2017, algunas de las cuales presentan características destacables en cuanto a comportamiento agronómico, aptitud a la conservación y calidad gustativa. Se exponen a continuación las principales características de algunas de las variedades evaluadas en los últimos años y de las que se conoce ya su comportamiento. Su calendario de maduración se expone en la Figura 4.
- ‘Carmencov‘ de recolección pocos días antes de ‘Limonera’ y objeto de diversas plantaciones en el Valle del Ebro. Destaca por la facilidad de manejo, vigor medio y fructificación en lamburdas, por su calidad gustativa y por su sobrecoloración rosada por la insolación.
- ‘Corinacov‘, variedad del tipo ‘Conference’ pero de recolección unos 12 días antes y con características similares a la misma en cuanto a presentación, pero de sabor más dulce y con desarrollo sujeto a las condiciones del obtentor/editor. Hasta ahora sola ha posibilitado su plantación en Bélgica destinando las producciones a la exportación hacia el Reino Unido.
- ‘Elliotcov’ (Selena®), variedad de la Universidad de Davis (EE.UU.), de recolección a principios de septiembre. El árbol entra rápidamente en producción si su manejo es adecuado, no es sensible a la alternancia y posee un buen potencial productivo siendo su vigor medio. Es incompatible con membrillero BA-29 por lo que utiliza como intermediarios ‘Comice’ o ‘Mantecosa Hardy’. El fruto es piriforme, de calibre medio, con russeting característico sobre la práctica totalidad del fruto y sobrecoloración rosada en los frutos más expuestos a la insolación. El pedúnculo fino y frágil rompiéndose con facilidad, lo que exige una recolección y manipulación extremadamente cuidadosas para no dañar los frutos. La pulpa es fina, jugosa, de sabor dulce y aromático y de excelente calidad gustativa. La conservación es excelente hasta marzo-abril en atmósfera controlada. Puede consumirse a los pocos días de la recolección y no precisa su paso por frigorífico. Además es muy poco sensible al moteado y tolerante al fuego bacteriano. Su edición en Europa corre a cargo de la empresa española Eurosemillas y el desarrollo del club para producción ecológica con la marca ‘Selena®’ a la empresa viverística Pépinieres Escande (Francia).
- ‘Harrow Sweetcov’ procede de la Estación de Harrow (Ontario, Canadá) y es tolerante al fuego bacteriano. Fruto piriforme y con sobrecoloración roja por la insolación. De recolección a mediados de septiembre, árbol productivo que requiere un aclareo y regulación de la carga adecuado. Fruto con pulpa de textura fina, jugosa y de buena calidad gustativa; presenta una buena adaptación a climas cálidos. A pesar de sus interesantes características agronómicas y de la calidad del fruto, su introducción solamente se ha dado a pequeña escala en el sur de Francia y en el Valle del Ebro, dado que es difícil su posicionamiento a nivel comercial.
‘Angelys®‘ obtenida por el INRA (Francia), de recolección tardía (principios de Octubre), se ha desarrollado en forma de «club» en Francia, Italia y España. Se caracteriza por su fácil producción. El calibre puede ser excesivo según la carga y el russeting variable en función de las condiciones climáticas del año. Es difícil obtener su excelente calidad gustativa al depender tanto de la fecha de cosecha como del manejo en poscosecha. En fase de regresión en nuestro país.
De entre las nuevas variedades de evaluación más reciente señalar:
- ‘CRA IFF-H’. Procedente del CREA de Forli (Italia). Destaca por su precocidad, dado que se recolecta a mediados de junio (Figura 3). Presenta frutos de color verde, con un largo pedúnculo y pequeño calibre (inferior a ‘Ercolini’). La pulpa es jugosa, aromática (recuerda a la variedad ‘Magallón’) y es de buena calidad gustativa. Potencial productivo media al tratarse de una variedad de recolección muy precoz.
- ‘HW-623cov’. Variedad obtenida en la Estación canadiense de Harrow (Ontario) tolerante al fuego bacteriano. Editada por Star Fruits (Francia). El árbol es de vigor medio y entrada en producción normal. Recolección la tercera semana de agosto, después de ‘Blanquilla’. Tolerante al fuego bacteriano. El fruto es característico por su forma calabaciforme, de cuello estrecho y típica sobrecoloración roja en la cara más expuesta a la insolación, más aparente en climas cálidos. Buena calidad gustativa, pulpa fina, fundente y buena aptitud a las manipulaciones. Otro grupo importante lo constituyen las nuevas variedades obtenidas en las últimas décadas en la Estación de Harrow (Ontario, Canadá), tolerantes al fuego bacteriano y que forman la serie “Harrow”, editadas por Star Export (Francia) donde algunas se han desarrollado a escala comercial. Algunas aportan en general un buen comportamiento productivo y calidad (‘Harrow Sweet’, HW-623’ o ‘Harrow Crisp’ (HW-610)) en nuestras condiciones climáticas, mientras otras como ‘Harrow Sundown’, ‘Harrow Bounty’, ‘Harrow Gold’ o ‘Harrow Love’, se encuentran en fase de evaluación en el IRTA.
- ‘Q-Tee®‘ (Celinacov), ‘Q-Tee’ (Celinacov), obtenida por Stein Harald (Graminor, Noruega), editada y multiplicada por el grupo viveristico ABCz (Bèlgica). En fase de desarrollo comercial en diversos países de ambos hemisferios (principalmente Europa y Suráfrica) por la empresa Fruithandel Wouters (Bélgica) bajo la fórmula de “club”. En cada país, el licenciatario de la variedad firma un contrato por el que se compromete a plantar 300 ha en una plazo de 10 años. En la actualidad (febrero 2018) se contabilizan un total de 507 ha plantadas a escala mundial, siendo Suráfrica el país que cuenta con la mayor superficie plantada (225 ha) seguido por Bélgica (125 ha). En España su desarrollo se inició en 2014 en exclusiva por la empresa Fruites Font (Torres de Segre, Lleida) y en 2018 cuenta con 59 ha plantadas de entre 1 y 4 años de edad. La previsión es que para el año 2026 las plantaciones totales de ambos hemisferios alcancen las 1.300 ha. Se trata de una variedad de recolección a final de julio, antes de ‘Blanquilla’ (Figura 3), con sobrecoloración roja por la insolación, más intensa en climas más cálidos, al igual de lo que ocurre con la variedad ‘Carmen’. Árbol vigoroso, de floración después de ‘Abate Fetel’ y 2-3 días antes de ‘Williams’ o ‘Conference’. Esta variedad se caracteriza por ser de frutos bicolores si la iluminación es la adecuada, es de rápida entrada en producción y no sensible a la alternancia. Aporta una excelente calidad gustativa, con pulpa de textura crujiente y jugosa, aromática y dulce (Figura 5), sin astringencia alguna y que además no requiere de paso por frío para su consumo. Las condiciones de frigoconservación son muy específicas de la variedad, siendo muy importante la definición correcta de la ventana de recolección.
En la misma tipología de frutos bicolores se enmarca ‘Cheeky®’, nueva variedad obtenida por ARC y con licencia exclusiva mundial de Culdevco (Suráfrica), país donde hasta ahora se ha desarrollado a escala comercial. En dicho país es la nueva variedad de pera más plantada ocupando en 2017 una superficie de 350 ha. En fase de experimentación en diversos países del mundo. De maduración solapada con ‘Williams’ es decir a mediados de agosto (Figura 4), es de rápida entrada en producción aunque sensible a la alternancia. El color de los frutos aparece precozmente y en la recolección la chapa roja suele decrecer de intensidad ocupando alrededor de la mitad del fruto, dependiente de la exposición a la luz. Puede disminuir con la maduración en años muy cálidos. El fruto es piriforme-oblongo, superior a ‘Williams’, de buena calidad gustativa, sabor dulce y aromático, pulpa con textura jugosa, no astringente (Figura 5) y con excelente conservación frigorífica si se recolecta con firmeza de alrededor de 7 kg.
* Coloración roja. A pesar de los esfuerzos realizados para conseguir variedades de coloración óptima y atractiva (brillante), ninguna de las obtenidas ha tenido un impacto significativo a escala comercial. Señalar a título de ejemplo:
- ’Sweet Sensation®’ (‘Rode Doyennecov’), mutación con epidermis roja de la variedad ‘Comice’ de excelente calidad gustativa, con pulpa aromática, jugosa y de sabor dulce, característico de la variedad. Su coloración en zonas cálidas es poco atractivo, y su producción es similar a ‘Comice’. En fase de desarrollo a escala mundial por la plataforma global LVE (Licensed Varieties Editors) de Bélgica. En el año 2017 se encontraban plantadas 400 ha en Europa, estableciéndose un potencial objetivo de 840 ha en 2015.
- ‘Lowry-2’ variedad procedente de Estados Unidos de coloración rojo intenso y muy precoz en su totalidad. Forma similar a ‘Red Bartlett’ pero calibre superior. Árbol de vigor medio y producción media, principalmente sobre lamburdas. Poco sensible a la alternancia. Con características similares, aunque color inferior se encuentra ‘Lowry-1’ del mismo origen pero de recolección de 4 a 6 días después.
* Epidermis bronceada. En pera la epidermis bronceada permite una diferenciación de los frutos que los hace fácilmente identificables por el consumidor. Además este tipo de epidermis es menos sensible a rozaduras y a la manipulación por lo que es un atributo muy deseable por las centrales de confección. Algunas variedades de esta tipología son:
- ‘Grand Champion’ constituye la variedad de referencia de entre las de epidermis bronceada. El russeting cubre la totalidad del fruto independientemente de las condiciones meteorológicas del año. El árbol es de vigor medio y poco ramificado. Su floración es tardía.
- ‘Duncans Gold®‘. Variedad editada por Star Fruits (Francia) de epidermis bronceada de recolección la primera semana de septiembre. Frutos de forma piriforme, bastante regular, de buen calibre y homogénea. El árbol es de vigor medio, porte semiabierto y de entrada en producción bastante rápida con una buena productividad. El russeting fino y atractivo, cubre la casi totalidad del fruto. Pulpa de excelente calidad, jugosa, dulce y aromática, de buena calidad.
CONCLUSIONES
El peral ha sido tradicionalmente una especie importante en España pero que se encuentra en regresión continuada en las dos últimas décadas por diversos problemas que afectan tanto a la producción como a la friconservación. Dicha regresión ha ido paralela al incremento de las especies de hueso, por su mayor facilidad de producción y el menor coste de plantación. Sin embargo tras las crisis recurrentes del melocotonero, una mayor diversificación hacia especies de pepita como el manzano o el peral es necesaria.
Al contrario que en el manzano, la innovación varietal en peral apenas ha sido significativa y la producción sigue basándose en pocas variedades tradicionales de cada país que aportan un buen nivel de calidad y cuentan con consumidores muy fidelizados y poco propensos al cambio. A pesar de ello, en los últimos años se están introduciendo a escala comercial nuevas variedades principalmente bicolores con un desarrollo controlado y marquista bajo la fórmula de “club”. Ello que puede beneficiar a la diversificación de esta especie y a la captación de nuevos consumidores. Estas variedades además de aportar una presentación diferente, tanto en color como en forma y calibre, son innovadoras en cuanto a sabor y textura combinando caracteres de peras europeas y asiáticas.
La mayor tecnificación y especialización que requiere el peral, unido a plagas y enfermedades de difícil control como la Psila o el fuego bacteriano y las dificultades para el control de determinadas fisiopatias de poscosecha, siguen siendo factores limitantes para el cultivo de esta especie. Sin embargo, una producción y oferta decrecientes y en el futuro la disponibilidad de nuevas variedades, constituyen alicientes para apostar por una especie de tradicional importancia y necesaria para para la diversificación de la producción frutícola de nuestro país.
