¿Qué relación tiene un material renovable con uno biodegradable? NOVAMONT
Renovable se refiere al origen de las materias primas y biodegradable al comportamiento de los materiales al final de su ciclo de vida. Hay que tener en cuenta que no todo lo renovable es necesariamente biodegradable.
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Es cada vez más frecuente hablar de un material renovable en un entorno en el que la importancia de la economía circular se va dando a conocer gracias a la repercusión mediática y social de los Objetivos de Desarrollo Sostenible propuestos por Naciones Unidas. Pero es importante no confundir un material renovable con uno biodegradable. Son distintas características que los materiales o productos pueden tener y son independientes la una de la otra. Renovable se refiere al origen de las materias primas y biodegradable al comportamiento de los materiales al final de su ciclo de vida.
Un material se puede clasificar como renovable si se restaura a un ritmo igual o superior al de su propia explotación. Como ejemplo, los productos producidos a partir de fuentes vegetales suelen renovarse rápidamente. A nivel técnico, ser renovable se calcula a partir de la cantidad de carbono reciente presente en los materiales, estableciéndose como más renovables productos o materiales derivados de fuentes animales o vegetales, y como menos renovables aquellos procedentes de fósiles.
Por otro lado, cuando nos referimos a si un material puede ser biodegradable, hablamos de la capacidad que tiene para descomponerse en sustancias más simples mediante la actividad (enzimática) de microorganismos. La biodegradación forma parte del ciclo natural de la vida en el planeta Tierra, que se basa, principalmente, en la estructura química del carbono.
Para Novamont, el sector agrícola es una pieza clave en su modelo de bioeconomía circular
Un material biodegradable depende de su estructura química y es independiente de su origen, ya sea totalmente renovable o no. Sin embargo, hay que tener en cuenta que no todo lo que tiene origen renovable es necesariamente biodegradable.
Existen materiales 100% renovables y biodegradables (ej.: los polihidroxialcanoatos), materiales 100% renovables pero no biodegradables (ej.: polietileno de bioetanol), materiales 100% de origen fósil y 100% biodegradables (ej.: policaprolactona).
Es importante saber que cuando hablamos de materiales biodegradables tenemos que cerciorarnos de que estamos hablando de una biodegradación en el entorno concreto de aplicación. Por ejemplo, en el caso de los acolchados biodegradables en suelo, como son los Mater-Bi, estos deben cumplir con el estándar UNE EN 17033, que certifica que el material se biodegradará completamente en el suelo agrícola, sin aportar contaminantes ni efectos tóxicos.
Para Novamont, el sector agrícola es una pieza clave en su modelo de bioeconomía circular. Por ello, diseñan sus productos con el fin de aportar una solución a la gestión de los residuos de este sector, evitando añadir contaminantes al suelo y al medio ambiente, sin generar microplásticos y permitiendo desarrollar sistemas de cultivo de bajo impacto y económicamente sostenibles que garanticen el mantenimiento y la mejora de la fertilidad de nuestros suelos.