¿Cuál ha sido su trayectoria profesional?
Comencé desde muy joven, compatibilizando estudios y trabajo en el negocio familiar. Desde los 18 años combiné mis estudios en Administración y Dirección de Empresas con el trabajo en la empresa familiar. Así, después de más de 25 años he podido conocer y trabajar en casi todas las áreas de nuestro negocio. La experiencia ha sido una mezcla entre duro aprendizaje y momentos de tensión, con la satisfacción de crecer y conocer a fondo muchos de los secretos de un negocio familiar del sector agroalimentario, que tan bonito y complejo es a la vez.
¿Cómo ve el sector en materia de igualdad?
Todavía existe la idea de que el sector hortofrutícola, particularmente en la parte de producción en campo, está dominado por hombres. Eso es cierto en algunas áreas, pero, por otro lado, está aumentando el número de mujeres en todos los ámbitos. Se han dado muchos pasos, pero se necesita mucho más para mejorar en integración e igualdad de oportunidades.
“Para que la paridad sea efectiva hace falta que, de manera natural, se permita una concurrencia competitiva en igualdad de oportunidades para todas las personas”
Bajo su experiencia, ¿qué falta en las empresas para que la paridad sea efectiva?
Creo que las empresas deben promocionar a las mujeres por su valía, eso está claro, no sólo promocionar por el hecho de ser mujer, debe tratarse de méritos y valía y, por otro lado, no minusvalorar a una mujer por el hecho de serlo, como tampoco a un hombre por ser hombre.
Considero que, para que la paridad sea efectiva, hace falta que, de manera natural, se permita una concurrencia competitiva en igualdad de oportunidades para todas las personas, sean hombres o mujeres.
En nuestra empresa, la gran mayoría de puestos de responsabilidad corresponden a mujeres, personas formadas, trabajadoras y comprometidas con su trabajo. Fomentamos el talento por razones fuera de una paridad impuesta.
Si hablamos de profesiones más demandadas con perfil de mujer, diría que son casi todas, pero responsables de calidad, responsables de línea y almacén serían las más solicitadas ahora mismo.
“Cada vez más, existen más mujeres en todas las materias del sector hortofrutícola”
¿Y si hablamos de conciliación?
El asunto de la conciliación es fundamental y, bajo mi punto de vista, que sufro de manera directa, por ser madre de dos hijos, muy complicado. Es cierto que aún se considera un hándicap y no es justo cargar la responsabilidad de la conciliación, entendida como el trabajo que hay en casa y la familia, a las mujeres de manera exclusiva. Ese rol es algo del pasado.
Por ello, se debería trabajar más en las medidas que permitan compatibilizar puestos de trabajo con la vida personal y familiar. Es un asunto que requiere diálogo y acuerdos entre las empresas y las empleadas.
¿Cómo se puede atraer a las nuevas generaciones?
El sector hortofrutícola tiene en el relevo generacional uno de sus grandes retos y problemas para el futuro y esto afecta por igual a hombres y mujeres. Las nuevas generaciones no perciben este sector como atractivo, y esto debe cambiar. En nuestro caso, potenciamos la mejora continua, la ilusión por nuestro proyecto y la firme creencia de que el trabajo bien hecho trae resultados y futuro para este sector.
