Todos los análisis realizados en las tres últimas décadas apuntaban en la misma dirección: al sector hortofrutícola almeriense le sentaría muy bien avanzar hacia la concentración de la oferta en origen para obtener mayor valor de sus ventas. Pues bien, en la última década, se han registrado movimientos que apuntan a que esa concentración en grupos más fuertes se va haciendo realidad. El último balance realizado por el Servicio de Estudios de Cajamar Caja Rural apunta que solo cinco comercializadoras acaparan ya prácticamente el 40 por ciento del total de las ventas.
Esos cinco líderes están encabezados por una alhóndiga como La Unión, que, en datos de la campaña anterior (2016), sumaba 240 millones de euros de facturación, aunque probablemente llegue a los 260 millones este año.
A corta distancia, con facturaciones en el entorno de los 200 millones, se colocan Agroponiente (con la suma de Vegacañada), la CASI y Vicasol. Tras ellas un grupo fuerte con empresas como Agroiris, Primaflor, Costa de Almería o Murgiverde, todas ellas por encima de los 150 millones.
Las fórmulas
La cuestión es que en Almería no hay un único modelo de éxito para alcanzar esas cifras y, de hecho, entre los líderes en comercialización conviven varias formas de aproximarse a la tan ansiada concentración. En el caso de Unica Group, se registra un crecimiento de tipo corporativo con la suma de hasta siete empresas a un proyecto común.
En el de Alhóndiga la Unión, el modelo es un crecimiento expansivo, con la suma de nuevos territorios y productos. Aún siendo alhóndiga, su comportamiento comercial se aproxima cada vez más a una empresa comercializadora pura.
Crecimiento orgánico
El caso de Vicasol recoge lo que se califica como un crecimiento ‘orgánico’, ya que se basa en la incorporación de nuevos socios, agricultores que eligen formar parte del proyecto cooperativo, y en esa concentración basa su fuerte ritmo de crecimiento.
La cuarta fórmula es la elegida por Murgiverde y se trata de un modelo mixto, ya que se inició con una fusión de cooperativas, pero se ha abierto a la incorporación al grupo de nuevas empresas de la comarca del Poniente.
Queda pendiente conocer la evolución de la CASI, inmersa en varios procesos de crecimiento que inicialmente tuvo que aparcar, dirigidos a la expansión a nuevos territorios en busca de incrementar su catálogo. Hace pocas fechas sus socios dieron el visto bueno a un proyecto que marcará su futuro.
Las empresas de la provincia copan el ránking exportador
Almería mira cada vez más a los mercados exteriores para colocar en ellos sus hortalizas y en la última campaña, la 2016/2017 esa apuesta se ha visto refrendada por las cifras al incrementarse de nuevo el porcentaje de la producción total de la provincia destinado a la exportación, que es ya del 76,2 por ciento frente a l 75,4 por ciento de la anterior, que ya marcó máximos históricos, ahora batidos.
Como nuevo récord son los 2.273 millones de euros obtenidos en esos mercados internacionales, básicamente en los europeos, con un aumento del 14,83 por ciento basado en la mejora de los precios obtenidos por las ventas. Pepino, berenjena, calabacín y tomate, con un 42,1, un 41,1, un 32,2 y un 17,1 por ciento de mejora en cotizaciones, han tirado de ese dato.
Líder destacado
Los datos globales colocan a cinco empresas hortofrutícolas de la provincia entre los seis primeros comercializadores españoles en el ránking de la exportación española; son, por este orden, Única Group, la Alhóndiga La Unión, Vicasol, Agroiris y Murgiverde.
En la tabla de los nueve primeros se cuela una sexta empresa, Agroponiente y, entre ellas sólo tres de otras provincias : G´S España(ubicada en Torrepacheco, Murcia), Granada La Palma y Fruca (de Fuente Álamo, Murcia), según los datos recogidos por la revista de Alimarket correspondientes al año 2015.
La mayor parte de esos grupos almerienses han sido, también, los que más han crecido gracias a procesos de concentración, acaparando una parte importante de la facturación total del sector hortofrutícola almeriense.
Esa concentración parece hoy imparable, pero los expertos advierten que tendrá un coste para el conjunto de las empresas, varias de las cuales están pasando momentos difíciles, en particular las del sistema de alhóndigas.
Fuente: La Voz de Almería