Waikiki, el nuevo y exclusivo melón de JimboFresh
Waikiki es un fruto exótico, dulce y jugoso. Su piel blanca perlada y con un característico escriturado contrasta con su carne color salmón intenso.
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La combinación de blanco y anaranjado recuerda a las playas tropicales y paradisicacas, de aquí su nombre. Destaca por un sorprendente sabor, su carne crujiente y refrescante. Waikiki responde a los cambios actuales, donde se busca además de sabor, tamaño, junto a un valor añadido que lo convierte en un producto novedoso.
Un melón en exclusiva por parte de JimboFresh en todo el mundo (excepto Portugal), con una respuesta muy positiva por el consumidor, donde su demanda estará respaldada con una producción de 12 meses al año con más de 200 hectáreas repartidas entre España, Brasil y Senegal, lo que permite un abastecimiento del lineal durante todo el año.
Comercialmente, la confección de Waikiki se ha desarrollado con un diseño que mantiene su atractiva, que la hacen llamativa y única. Mostramos un tono de la marca para que el consumidor pueda diferenciar rápidamente, trasladando al público a un ambiente exótico, zen, de tranquilidad y veraniego. Se presenta en caja 50x40x18 en calibres 4, 5, 6, y 8 piezas.
Waikiki no es solo un melón que destaca por su buen comer y un calibre relativamente pequeño, sino que está dirigido con un público muy definido, que busca nuevas sensaciones y experiencias y que manifiesta un mayor interés tanto en su producción y procedencia, y que satisfaga otras de sus necesidades: que sea un producto saludable, con una confección atractiva, y además que responda a una producción que esté bajo estrictos protocolos de trabajo todos ellos respetuoso con el medio.
Con cada bocado, Waikiki nos transportará a playas de aguas azules y cristalinas. A playas de grandes olas y arena fina con su característico color blanco. El sol sobre nuestra piel y el sabor crujiente y refrescante de Waikiki, todo ello enmarcado en un enclave paradisiaco. Un melón que nace desde el paraíso, en sus olas y donde remontarlas sobre nuestra tabla de surf surcando bajo un fondo de coral de intenso color anaranjado. Un ambiente único, jovial, espontáneo, divertido, único y donde Waikiki será el protagonista. No hay verano sin Waikiki”.
Hoy hemos probado el melón waikiki, y ha sido una gran decepción. No, no nos ha transportado a las aguas cristalinas del caribe, sino más bien a una charca sosa de un secarral. Fue comprado en la cadena de supermercados Día.