Cada vez que hay un ataque a nuestros camiones en Francia, se agrede directamente al conjunto de la agricultura y la ganadería española”. Con estas palabras iniciaba su intervención Lorenzo Ramos, secretario general de UPA que hoy ha comparecido en Mérida para condenar las acciones llevadas a cabo por agricultores franceses contra el transporte de productos españoles en el país vecino: “No se puede consentir que no podamos transitar libremente por las carreteras francesas”, señala.
Ramos critica la falta de decisión de las autoridades española y europea ante estos ataques: “Hay que pasar de la acción a la reacción”, incide. Desde UPA se ha trasladado al Ministerio de Agricultura la necesidad de que este tema se trate en el Consejo de Ministros de Agricultura de la UE para intentar resolverlo “cuanto antes”. Además Ramos, en su calidad de Vicepresidente de las Organizaciones Profesionales Agrarias en el COPA-Cogeca, ha remitido una carta a la secretaría general de este organismo para que se convoque una reunión urgente en la que se exigirá “que se acabe de una vez por todas con este tipo de ataques”. Asimismo, también ha enviado un escrito a la Presidenta de la Comisión de Agricultura del Parlamento Europeo, Clara Aguilera, para que interceda en esta situación.
“Creemos que tenemos que usar la vía del diálogo para resolver esto”, señala Ramos, que no es partidario de responder con la “misma moneda” a los agricultores franceses: “Cada día entran en España miles de litros de leche desde Francia, pero nosotros creemos que esa no puede ser la solución, crear una guerra entre nosotros”.
Ramos se pregunta si la reacción del Gobierno español sería la misma si en vez de ataques a los camiones con productos agrícolas y ganaderos, se atacara a sectores como el de la automoción: “¿Permanecería callado el señor Rajoy?”. Asimismo, Ramos recalca que las consecuencias de estos ataques van más allá de la mercancía perdida, ya que esta inseguridad puede poner en peligro futuros pedidos a las empresas españolas: “Al final se acabarán suspendiendo los pedidos y esto amenaza nuestras exportaciones”.
El secretario general de UPA ha mostrado su preocupación por la repercusión que puedan tener los movimientos euroescépticos en la consolidación de las políticas europeas agrarias: “Esto debilita la posición de la Unión Europea en los mercados mundiales”.
Fuente: www.upa.es