La campaña citrícola se iniciaba con la mala noticia de la entrada en vigor de aranceles al sector agrícola por parte de Estados Unidos. Ello ha hecho que en poco más de un mes no se hayan vendido cítricos de la Comunidad Valenciana a Estados Unidos, según ha podido conocer COPE.
Pero lo peor es que tampoco hay expectativas de que puedan efectuarse cargamentos para exportar en los próximos meses, algo que lamenta en COPE el secretario general de La Unió de Llauradors, Carles Peris, ya que va a provocar consecuencias muy negativas para la economía, el empleo y los agricultores.
«Vamos a perder 15 millones de euros pero también la plataforma logística que implementaba puestos de trabajo va a poder hacerlo. Eso es negativo, así como romper una línea de mercancías marítima«, subraya Peris.
Y es que desde Castellón y principalmente a través del Puerto de Castellón, se exportaban cada año unas 12.000 toneladas de cítricos hacia el país norteamericano, aunque tras los aranceles de Trump ha habido que buscar mercados alternativos, pudiéndose recolocar gran parte de la mercancía en Europa y Canadá.
Preocupa para futuras campañas citrícolas, así como para el vino y el aceite, como reconoce el secretario general de La Unió de Llauradors, «esta campaña hemos tenido suerte en ese sentido por haber podido recolocar los cítricos«, pero «no es bueno que se cierren las puertas a un mercado que albergaba cierta esperanza y que en este momento damos por pérdido«.
Por último, llama Peris a responsabilidad por parte de la Unión Europea, «veremos qué capacidad de reacción tiene la Comisión Europa para equilibrar y reparar estas malas situaciones y dinámicas que acaban pagando los productores sin tener ninguna culpa«.
Carta al Gobierno y a Europa
Desde La Unió de Llauradors se han remitido sendos escritos al ministro de Agricultura en funciones, Luis Planas, así como a la Comisión Europea, con tal de solicitarles que impongan aranceles a los productos importados de Estados Unidos y para pedir responsabilidades patrimoniales y que asuman las pérdidas de los productores.
Tal y como explica Carles Peris a COPE, «si han cometido infracciones que la Unión Europea que se impongan aranceles, sobretodo a frutos secos y a la almendra«, además de «pedir daños patrimoniales porque un conflicto que no ha creado el sector agroalimentario lo estamos pagando nosotros» y es que «por unas ayudas que se catalogan de ilegales creo que debería haber compensaciones porque hay pruebas evidentes de que en el sector citrícola no se van a hacer envíos. Queremos que alguien se haga responsable de aquellas malas políticas que se están haciendo«, concluye.
Fuente: COPE