A falta de que el Gobierno concrete el Plan Anual Normativo 2022, envases, aditivos, residuos de envases, información, etiquetado, publicidad, desperdicio alimentario, entre otras, marcarán el devenir en la evolución en la legislación alimentaria en los próximos doce meses según AINIA.
Una de las principales iniciativas que afectará a todo el sector es la Ley de Residuos y Real Decreto Envases y Residuos de Envases. Para José María Ferrer, responsable del Departamento de Derecho Alimentario de AINIA, la nueva Ley se publicará en breve, máxime teniendo en cuenta que el plazo para la transposición de la Directiva 904/2019 está claramente sobrepasado. También, aunque en el medio plazo, hay que contar con novedades legislativas en la UE respecto a los materiales en contacto con los alimentos (consulta pública de la Comisión Europea sobre el reglamento sobre materiales plásticos reciclados destinados a entrar en contacto con alimentos), según el experto.
Otras medidas de amplio impacto son las relacionadas con la información, etiquetado y publicidad. Aunque, en este caso, el centro tecnológico prevé que transcurrirá algo más de tiempo hasta que veamos aprobadas las medidas propuestas en el Proyecto de Real Decreto sobre publicidad de alimentos y bebidas dirigida al público infantil, y otras posibles actuaciones en el ámbito del etiquetado nutricional voluntario, tanto en el ámbito nacional como en el comunitario.
Desarrollos legislativos más específicos, pero que tendrán un alto impacto en aquellas industrias que emplean ciertas sustancias, son las relativas al dióxido de titanio (E 171) y su prohibición, o aquellas más restrictivas para el Bisfenol A.
Durante este año también veremos medidas para regular la comercialización de alimentos en establecimientos al por menor, a través del Proyecto de Real Decreto por el que se regulan determinados requisitos en materia de higiene de la producción y comercialización de los productos alimenticios en establecimientos de comercio al por menor.
Además, será objeto de actualización la legislación sobre aguas minerales naturales y de manantial envasadas con la modificación del Real Decreto 1798/2010, de 30 de diciembre, por el que se regula la explotación y comercialización de aguas minerales naturales y aguas de manantial envasadas para consumo humano, y el Real Decreto 1799/2010, de 30 de diciembre, sobre la regulación del proceso de elaboración y comercialización de aguas preparadas envasadas para el consumo humano. También esperamos que, por fin, se establezca la regulación para los coadyuvantes tecnológicos, un tema importante y que lleva varios años en proyecto, señala Ferrer.
Por último, el responsable de AINIA destaca el proyecto para luchar contra las pérdidas y el desperdicio alimentario. “Se trata de una propuesta de gran alcance, dado que las futuras medidas impactarán en todo el sector agroalimentario”, apunta Ferrer. Se establecerán medidas legales para lograr las reformas estructurales en la cadena de elaboración, transformación y suministro de productos alimentarios, que impulsen la reducción de pérdidas y desperdicio de alimentos a través de la futura ley de prevención de las pérdidas y el desperdicio alimentario.