Con el anuncio de las medidas extraordinarias en la Comunidad de Madrid el día 10 de marzo, que desembocó en la declaración del estado de alarma a finales de semana, el coronavirus se convierte en el gran protagonista de la vida cotidiana del país. 7 de cada 10 españoles declaraban estar muy preocupados (8 de cada 10 a finales de semana), respecto al 27% de la semana anterior, según los últimos datos de Kantar, consultora líder en paneles de consumo, presentados el pasado viernes.
Esta preocupación se trasladó directamente a las compras de productos de gran consumo, con un incremento de hasta el 21% del gasto semanal la semana del 9 al 15 de marzo. El incremento estuvo impulsado por cestas de la compra más grandes, gastándose un 25% más que las semanas previas a la crisis del coronavirus. Aunque todos los tipos de hogares incrementaron su gasto, fueron los jóvenes de menos de 35 años quiénes invirtieron más en sus compras, casi un 40% más de gasto semanal, lo que representa unos 33 euros respecto a los 21,4 euros de más que realizaron en promedio los hogares españoles.
Fuerte carga de productos de alimentación envasada
Con el aumento de la preocupación, los consumidores empezaron a almacenar productos, especialmente de alimentación envasada, que multiplicaron por 2,5 sus ventas esa semana respecto a una semana promedio. Los productos para bebés, los de limpieza y droguería mostraban incrementos superiores al 40%. Mientras que los frescos, especialmente los perecederos, crecían sólo entre el 10 y el 15%.
Arroces, legumbre, conservas y pastas fueron las categorías que más crecieron, en comparación con el promedio de las ocho primeras semanas del año. Y en las cestas se podía encontrar, a partes iguales, los principales fabricantes y la marca del distribuidor.
Vuelta a la compra de proximidad
El consumidor español adaptó su lugar de compra y las ventas de las tiendas de proximidad se dispararon la semana del 9 al 15 de marzo. Los supermercados más pequeños, por su cercanía a los hogares y la tipología de su oferta, fueron los principales beneficiados por las primeras medidas de precaución, creciendo tres puntos porcentuales de cuota de mercado. Grupo DIA, que cuenta con el mayor parque de tiendas en nuestro país, es el que más incrementó su participación, logrando una cuota del 6,6%, los mejores resultados de los últimos doce meses. Un efecto similar se dio con los supermercados regionales, con la mayor parte de sus tiendas integradas en centros de las ciudades y pueblos dentro del concepto proximidad, y que entre todas las enseñas ganaron 1,2 puntos de cuota. En cambio, las dos cadenas que han capitalizado el crecimiento en los últimos años, Mercadona y Lidl, obtuvieron cuotas algo inferiores a lo que es su media anual.
El confinamiento cambia los hábitos de los españoles
Con el periodo de cuarentena impuesto por el Gobierno, en la primera semana de confinamiento, las rutinas y hábitos de los españoles se vieron alterados por completo. Así, la prioridad durante los primeros días de reclusión fue limpiar y ordenar (59,5%), ver la televisión (54,7%) y mantener el contacto con familiares y amigos a través de servicios de videollamadas (54,3%). Destaca también el interés por cuidarse y mantenerse sano, haciendo más deporte (37,5%) y comiendo más equilibrado (33,4%).
Y lo mismo pasó con el consumo fuera del hogar. Con el inicio del confinamiento, la restauración se vio obligada a cesar su actividad y bajó a mínimos, aunque en algunos casos se mantienen los servicios de comida a domicilio. Con los establecimientos cerrados, el consumo se trasladó dentro de los hogares. Tras la primera semana de confinamiento, se incrementaron un 25%, las ocasiones de consumo que cada individuo hace en casa.
Fuente: KANTAR, Panel de Consumidores