“Los productos bio son los que más crecen en el mercado de gran consumo”
Las resistencias genéticas a enfermedades y, en un futuro cercano, a plagas serán clave para el desarrollo del pimiento ecológico y esta es la línea en la que trabajan Syngenta y Zeraim, que ya cuentan con 16 variedades con resistencias a oídio y/o nematodos.
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Syngenta y Zeraim reunieron el pasado jueves en Almería a más de 200 profesionales de los sectores hortofrutícolas de la provincia y la vecina Región de Murcia en su Eco-Forum, que se celebró bajo el lema ‘Hacia un futuro sostenible’ y en el que se analizó el mercado de pimiento, la importancia de las resistencias para su cultivo y tendencias actuales. El evento sirvió para poner de manifiesto el claro liderazgo de España en la producción y exportación de pimiento, con 750.000 toneladas al año, entre el 8% y el 10% bio, un segmento al alza “en todas las hortalizas”, como afirmó Luis Martín, responsable de la Unidad de Hortícolas en Iberia de Syngenta, durante la inauguración.
De hecho, “los productos ecológicos son los que más crecen en el mercado de gran consumo”, comentó, posteriormente, Miguel Flavian, consultor experto en el mercado de Reino Unido, el séptimo consumidor mundial de alimentos bio, con el 1,5% del total. Según Flavian, los británicos no mostraron especial interés por este tipo de productos hasta que tuvieron lugar las distintas crisis alimentarias del país como, por ejemplo, la conocida como ‘crisis de las vacas locas’. Hoy, sin embargo, el británico es “un consumidor muy exigente, que puede llegar a pagar más por un producto que represente ciertos valores” como el respeto al medio ambiente. Pero no solo eso, “también exige innovación en formas, colores, sabores…”.
Solo tres retailers, Sainsbury’s, Waitrose y Tesco alcanzan una cuota de mercado del 70% en el segmento bio británico, que aún adolece de la existencia de grandes cadenas especializadas.
De tendencias de consumo habló, por su parte, el consultor David del Pino, que se refirió, en concreto a cuatro: la preocupación por la salud y el bienestar, lo natural y lo local, lo fácil y convenience y, finalmente, los bajos precios frente a los productos premium. En este sentido, comentó que, hoy por hoy, “el consumo se ha polarizado” hasta el punto de que, por un lado, encontramos los commodities, productos en los que prima su precio y, por otro aunque con la misma importancia, lo que él llamó masstige, “productos premium para masas”, dirigidos a esos consumidores que, fieles al resto de tendencias, están dispuestos a pagar un poco más por un producto diferenciado; en esa diferenciación, cobra especial importancia la sostenibilidad. “Al final, en el acto de compra, estamos buscando la autorrealización”, concluyó.
La producción en Almería y Murcia
Ambas provincias concentran la mayor parte de la producción española de pimiento e impulsan su crecimiento, sobre todo en el caso de Almería. En este sentido, Fernando Gómez, director general de Proexport, afirmó que, en solo seis años, la exportación española de pimiento ha crecido en 181.000 toneladas, 161.000 de ellas procedentes de Andalucía y, mayoritariamente, de Almería.
Para Murcia, es su cuarto producto por volumen de exportación, en torno a unas 85.000 toneladas al año, y el tercero en valor de esas ventas. Se refirió, asimismo, al sector ecológico murciano, que cuenta con 3.926 hectáreas, en total, 352 de pimiento. En esta línea, valoró la apuesta del sector por el ecológico, pero apeló a la prudencia: “Si todos nos ponemos a producir bio, corremos el riesgo de cargarnos el mercado”.
La radiografía del sector almeriense corrió a cargo de Juan Colomina, consejero delegado de Coexphal, quien antes de abundar en la situación del pimiento, puso el foco en otro asunto: “La subida del Salario Mínimo Interprofesional ha supuesto un aumento del 22% de los costes laborales en Almería”. Con este telón de fondo, afirmó que el sector debe “diferenciarse para trasladar estos costes al mercado”.
Almería produce el 72% del pimiento español y alcanza una cuota de mercado en Alemania superior al 70% en determinados momentos de la campaña. Si analizamos los últimos diez años, este cultivo ha experimentado “una buena marcha aparente”, apunta Colomina, quien, sin embargo, insiste en las dificultades que encuentra el sector en un mercado cada vez más competitivo.
Pimientos sostenibles todo el año
Hablar de ecológico implica tener que hacerlo de resistencias en el material varietal y esta es precisamente la línea de trabajo seguida por Syngenta desde hace más de 20 años. En 1995, la casa de semillas introdujo su primera variedad con resistencia a L4, hoy, junto con Zeraim, cuenta con un portfolio de 45 variedades de pimiento, 16 de ellas con resistencias a oídio y/o nematodos para su cultivo en Murcia y Almería con las que “podemos garantizar el suministro los 365 días del año”, afirmó Diego Díaz, Product Manager de Pimiento de Syngenta y Zeraim.
Pero no solo eso, estas variedades permiten optimizar el uso de fitosanitarios, están mejor adaptadas a cultivos que requieren de un menor uso de estos productos como puede ser el ecológico y facilitan la comercialización, sometida a umbrales muy severos de LMRs y a la restricción en el número de materias activas por parte de los supermercados.
El siguiente paso de la casa de semillas es “crear un escudo” para nuestras variedades y, en esta línea, Díaz avanzó que el siguiente paso es la introducción de resistencias a insectos como la mosca blanca y el trips; de hecho, prevén contar con su primera variedad de esta ‘nueva generación’ en fase precomercial la próxima campaña.
Syngenta realiza una fuerte inversión en investigación en pimiento para lograr un objetivo claro: “Queremos conseguir la sostenibilidad en el tiempo”. Así lo afirmó Víctor Domínguez, genetista, quien junto a José Antonio Chicón, del mismo Departamento, desgranó las líneas de desarrollo de la firma que pasan, como avanzara Díaz, por la introducción de resistencias a insectos. “Creemos en el poder de la innovación como forma para crear valor añadido para toda la cadena”, concluyó Chicón.
El sector ecológico
Por último, Juan Manuel Sánchez, director de Certificación del CAAE, lamentó la existencia de una “compleja legislación” del sector ecológico, que a pesar de contar con un reglamento europeo, este se interpreta de diferentes formas en cada país miembro y, en el caso de España, cuenta, además, con 17 interpretaciones más, según la comunidad autónoma. “Esta falta de armonización de la norma puede llevar a una pérdida de confianza del consumidor”, sentenció.