La adquisición de algo nuevo suele generar emociones positivas y satisfactorias. Lo nuevo nos une a la esperanza con la promesa de nuevas aventuras y posibilidades. Esa sensación precisamente fue la que vimos en los trabajadores de Semillero Los Crespos cuando entramos a sus nuevas naves.
La empresa, ubicada en Almería, se dedica a la plantación o siembra de cualquier tipo de semilla ofreciendo a los agricultores plantas hortícolas y ornamentales de primera calidad.
Debido a la creciente demanda de sus clientes, el semillero decidió ampliar otros 12.000 metros más y su construcción requería una serie de unos requisitos que les permitiese poder seguir produciendo plántulas de calidad.
Para su ampliación contaron con la empresa Novagric, (Novedades Agrícolas, S.A) cuya colaboración ha sido fundamental para que este proyecto sea una realidad. “Novagric garantizaba unos estándares de construcción y de arco que nadie en el mercado nos lo aportaba” explica Santiago Olivares, Técnico Agrícola en Semillero Los Crespos.
La nueva nave cuenta con un arco de 14,40 metros con el fin de aprovechar el máximo espacio posible para extender el mayor número de bandejas. En 12.000 metros pueden llegar a extender hasta 5 millones de plántulas.
La clave en semillero es tener una buena ventilación y optimización del espacio. Estas naves grandes y altas evacúan el calor por lo que tiene buena ventilación y sus dimensiones permiten un mejor aprovechamiento del espacio, ya que al germinar varios cultivos al mismo tiempo es necesario tener mucho espacio. “Todo eso se consigue gracias a estas naves de Novagric” asegura Santiago.
Las instalaciones son automatizadas, para la luz utilizan telas de sombreo, que es lo más parecido a un blanqueo, para que la planta se vea lo más homogénea posible y en cuanto a la solución nutritiva, tanto agua como abono, la aportan con trenes de riego que les ayuda también a optimizar recursos centralizando el riego únicamente en las plantas que lo necesitan.
Cada cultivo tiene su proceso depende del tipo de semilla, de la forma de trabajar y su manejo: “Es lo bonito de trabajar en semillero” explica Santiago.
El técnico cuenta que se siente muy realizado con su trabajo en Semillero Los Crespos y que está orgulloso de su equipo de trabajo, “Yo solo soy parte de un eslabón, una cadena, sin ellos no se podría hacer todo esto y ya si tienes unas buenas instalaciones todo suma».
Mayor optimización y calidad
Cuenta que trabajar en las nuevas instalaciones es mucho más cómodo por la fluidez y la rapidez en la que se extienden las bandejas. Los trabajadores están más contentos porque gracias a sus dimensiones la temperatura es más agradable y esa felicidad se la transmiten a la planta porque como él dice: “La planta es un ser vivo por lo que también siente, igual que lo notamos nosotros, lo nota la planta y eso es punto diferenciador de las naves”.
La inversión en estas nuevas instalaciones demuestra el enfoque que tiene la empresa en la mejora constante de sus productos y servicios. Por último, agradece a la empresa Novagric por las instalaciones y los plazos cumplidos durante la realización del proyecto y nos confiesa que todos los días cuando entra a trabajar le sale una sonrisa por cómo ha quedado el nuevo semillero.