Esta cifra supone 499 hectómetros cúbicos menos que en 2016 y está, además, por debajo de su media de los últimos diez años, situada en los 4.773 hectómetros cúbicos, según los datos aportados por el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA). Los embalses de la cuenca del Ebro se encuentran al 50,6% de su capacidad,
hidráulica española está al 38,93 por ciento de su capacidad total en la primera semana de 2018, con 21.832 hectómetros cúbicos (hm3) de agua, aumentando en la última semana en 441 hm3 (el 0,8 por ciento de la capacidad total actual de los embalses). Pese al aumento por las últimas lluvias, el arranque del nuevo año se convierte en el peor desde 1995, cuando los embalses se encontraban al 36,93 por ciento y en el segundo peor desde 1990, según las cifras históricas a las que ha tenido acceso Europa Press. En concreto, la reserva hidráulica cuenta en la actualidad con un 23 por ciento menos de agua que hace sólo un año y un 32 por ciento menos que la media de la década. Así, el año 2017 arrancaba con un 51,06 por ciento de agua embalsada, 12 puntos más que este año. Cabe destacar que las cuencas de Tajo y Duero presentan su menor volumen de agua embalsada en el arranque del año desde 1990 y que las del Segura y Júcar, aunque han registrado peores situaciones en el pasado y han crecido levemente en la última semana, se encuentran al 14,4 y al 25,3 por ciento, respectivamente. Las situaciones de la vertiente atlántica y la mediterránea varían levemente. En la atlántica, los embalses se encuentran de media al 38,7 por ciento de su capacidad (13,3 puntos menos que hace un año), un volumen que sólo fue inferior en 1992 y 1993. En la mediterránea, la reserva está al 39,64 por ciento (8,3 puntos menos que hace un año), una situación que sólo fue peor en el año 2007.
Fuente: Europa Press
