De esta forma, la cadena de descuento compra más de lo que vende en el país, obteniendo una balanza comercial positiva de más de 1.000 millones de euros.
“España sigue ganando protagonismo en la estrategia comercial de Lidl”, reconocen fuentes de la empresa. Del volumen total de compras, 3.900 millones corresponden a producto agroalimentario español, cada vez más presente en las tiendas de Lidl a nivel internacional.
Así, en 2017 la cadena ha incrementado las exportaciones un 30% y ha vendido más de 2.200 millones de euros en producto español en 30 países a través de su red internacional de 10.500 establecimientos.
“La excelente calidad de los productos españoles genera cada vez una mayor demanda, especialmente a nivel internacional. Nuestros clientes en Alemania, Francia o República Checa también quieren encontrar en sus tiendas las aceitunas, los embutidos, las frutas, las verduras o los vinos que producimos aquí”, ha comentado el director general de Compras de Lidl en España, Miguel Paradela.
En cuanto al sector hortofrutícola, la cadena alemana ha adquirido 1,9 millones de toneladas de fruta y verdura en España en 2017, un 35% más que el año anterior, valorado de 1.940 millones de euros. De este modo, Lidl asegura que ya compra el 10,5% de toda la producción hortofrutícola que se cultiva en los campos españoles, valorada en 18.547 millones.
La cadena exportó el 86% de las frutas y verduras adquiridas en nuestro país, por un valor de 1.668 millones de euros, cantidad que representa el 13% de toda la exportación del sector, valorada en 12.704 millones de euros.
Por otro lado, la compañía menciona un estudio realizado por la consultora PwC, que asegura que Lidl genera el 0,45% del PIB español (con datos de 2016), «una contribución muy significativa y proporcionalmente mayor a la de otras cadenas de supermercados en relación a sus respectivas cuotas de mercado».
Asimismo, su impacto en la economía del país tiene un efecto multiplicador de 17, es decir, por cada euro de Ebitda que Lidl obtiene en España, genera 17 euros adicionales al PIB total del país.