La Organización Mundial del Comercio ha anunciado este miércoles su decisión de autorizar que la Unión Europea imponga anualmente aranceles a 4.000 millones de dólares (unos 3.400 millones de euros) de productos exportados por EEUU a la UE debido a las ayudas ilegales de la Administración norteamericana a Boeing.
Con esta medida, se abre un nuevo capítulo en una disputa arancelaria que llevó el año pasado a que EEUU impusiera un arancel del 25% a productos emblemáticos en Andalucía como el aceite de oliva y la aceituna de mesa, además de a otros como cítricos, vinos de baja graduación o quesos. Esa decisión se produjo precisamente porque la OMC autorizó en octubre del año pasado a EEUU a imponer tasas a Europa por valor de 7.500 millones de dólares (6.900 millones de euros), una cantidad mayor que la que ahora avala que imponga Europa. La UE pedía sanciones, de hecho, por 8.500 millones de euros y Washington las reducía a 411 millones en sus alegaciones.EEUU impuso en 2019 una tarifa del 10% a la venta de aviones de Airbus –que después se elevó al 15%– pero incidió sobre todo en una larga lista de productos agrícolas, entre ellos varios españoles. En el caso del aceite de oliva sólo penalizó el producto nacional, no el de Italia, Portugal o Grecia, al ser nuestro país miembro del consorcio de Airbus.
Según informa Airbus, la Comisión Europea ha concluido su proceso público de consultas en relación con las contramedidas estipuladas y ha publicado ya una lista preliminar de productos estadounidenses a los que se aplicarían los aranceles, incluyendo los aviones de Boeing. “Airbus no inició esta disputa en la OMC y no deseamos que sigan viéndose perjudicados nuestros clientes y proveedores de la industria de la aviación y el resto de los sectores afectados”, declara Guillaume Faury, CEO de Airbus. “Tal y como hemos demostrado, estamos preparados y dispuestos a apoyar un proceso de negociación que conduzca a un acuerdo justo”. En el mismo sentido, la Comisión Europea (CE) insistió en que su preferencia es negociar con Estados Unidos antes que imponer las sanciones.
“La UE volverá a implicarse con EEUU de manera positiva y constructiva para decidir sobre los próximos pasos. Nuestra preferencia es un acuerdo negociado. De otro modo, nos veremos forzados a defender nuestros intereses y responder de manera proporcionada”, indicó el vicepresidente ejecutivo de la CE y titular de Comercio, Valdis Dombrovskis, en un mensaje en Twitter.
La esperanza del sector agroalimentario es precisamente que ambas partes decidan poner fin a esta disputa, algo que parece más sencillo con una administración demócrata al frente de la Casa Blanca tras las elecciones. Es cierto, de todas formas, que en la última revisión de los aranceles –tras la cual aceite de oliva y aceituna de mesa siguieron en el 25%– el secretario de Estado de Comercio, Wilbur Ross, mostró ya su disposición a negociar y llegar a un acuerdo, algo que, de momento, no se ha producido.
El representantes de Comercio de Estados Unidos, Robert E. Lighthizer, insistió en la vía del diálogo para solucionar el conflicto, pero al mismo tiempo afirmó que Europa no podría imponer aranceles a los productos estadounidenses porque Washington ya ha revocado la exención fiscal de la que se beneficiaba Boeing.
Curiosamente, Airbus anunció a finales del pasado julio que renunciaba a las condiciones preferentes en los créditos concedidos por España y Francia para su avión A350 y también modificó los acuerdos que tenía con Alemania y Reino Unido.
Fuente: Diario de Sevilla